El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, atacó a un sindicalista, luego de elegir a un secretario de Trabajo que criticó las nuevas protecciones de los trabajadores. La semana pasada, Trump viajó a una fábrica de Indiana dirigida por la empresa de aire acondicionado y hornos Carrier, para celebrar un acuerdo para evitar que los empleos se trasladaran a México, después de prometer abordar los planes de traslado durante la campaña. Luego de la visita, un líder sindical local de la planta, Chuck Jones, dijo que Trump había engañado al público sobre cuántos empleos se habían salvado, señalando que cientos seguirían en México. Después de que Jones apareciera en CNN para criticar a Trump, el presidente electo dijo en la red social Twitter, que el líder sindical había hecho un “trabajo terrible representando a los trabajadores”. Además, la elección de Andrew Puzder como secretario de Trabajo sacudió a líderes del movimiento obrero estadounidense que temen que los sindicatos enfrenten su más grave crisis en décadas. Puzder es un ejecutivo de comida rápida que se opuso a pagar más horas extras a los trabajadores y expresó escepticismo sobre el aumento del salario mínimo.