Es probable o casi seguro que, hace un año, nadie o muy pocos imaginaran que a los doce meses habría un escenario “favorable”, siquiera de coyuntura, para el Presidente que llegó a tal sin preverlo jamás. Sin plan estructurado. Sin equipo y con una debilidad parlamentaria inédita. ¿Sorprendió Milei o sorprende que haya sorpresa?

Es un interrogante con muy difícil respuesta. 

Se diría que los libertar