La empresa privada de correo OCA dejó atrás, por ahora, el riesgo de ir a la quiebra, al obtener en la justicia bonaerense una sentencia favorable a su pedido de apertura de la convocatoria de acreedores. La AFIP, uno de sus principales acreedores, le reclama el pago de deudas por más de 4000 millones de pesos y además le mantiene embargadas varias cuentas bancarias. El organismo recaudador se opuso a otorgarle un plan de facilidades de pago y ayer, según reflejaron algunos medios electrónicos, recibió con sorpresa que la Justicia proveyera el concurso.
“Con la resolución del juzgado, la AFIP nos debería levantar los embargos, que alcanzarían unos 2000 millones de pesos”, dijo el titular de OCA, Patricio Farcuh, según cita La Nación en su portal de noticias. La Sala 3 de la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial de Lomas de Zamora resolvió favorablemente la apelación presentada por los abogados de Farcuh, ordenando en consecuencia la apertura del concurso de acreedores. Esto le permitirá a las autoridades de la firma presentar una nueva propuesta de cancelación de la deuda. El mencionado tribunal revocó la resolución de primera instancia del Juzgado 10 de Lomas, contraria al pedido de apertura del concurso preventivo.
La semana próxima, el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) deberá resolver si le renueva la licencia a OCA para seguir como operadora de servicios postales. Dicha licencia vence en la primera semana de diciembre, y como una de las condiciones que le reclamaba el Enacom era que reencarrilara su situación financiera, se había especulado con que, en los próximos días, la empresa pasara a otras manos privadas o bien a la órbita de la empresa estatal Correo Argentino.
Todo el proceso es seguido con especial atención por el gremio de camioneros. No sólo por la preocupación por los 7000 trabajadores del transporte que se verían afectados por su cierre, sino porque el sindicato que encabezan Hugo y Pablo Moyano tiene interés directo por obtener el control de la empresa. Tanto Farcuh como Hugo Moyano, hoy operando desde veredas opuestas, son conscientes de que si no se despejaba el fantasma de la crisis se hacía difícil la continuidad de la firma.
Farcuh había recuperó el control de la firma este año, por decisión judicial, tras un período en el que la empresa postal quedó en manos del gremio y ex directivos asociados, con el fin de garantizar su continuidad, según se explicó en su momento. Farcuh, sin embargo, al retomar la conducción denunció una gestión fraudulenta que habría inflado el pasivo en mil millones de pesos, aproximadamente. Esta disputa divide aguas en el gobierno. La AFIP denunció penalmente a Farcuh por evasión impositiva y retención de aportes del personal. Pese a haber perdido una porción de sus negocios en los últimos años a manos de su competencia, OCA posee aún una flota de mil vehículos, más de 150 sucursales y factura por 7000 millones de pesos al año.