Es como volver a un tiempo ya ido, un viaje, una ensoñación impregnada de papeles que se perdieron en el tiempo, como los años, como la vida, como los poetas que ya se fueron…
Poder acceder a la lectura completa de cada una de las plaquetas (en impecables fotografías del anverso y el reverso de cada una de las mismas) que Ediciones La Cachimba realizó entre los años 1971 y 1974, en simultáneo con la revista que llevara el mismo nombre, es un lujo para cualquier lector ávido de enterarse qué pasaba con la literatura rosarina en esa época.
Entre esos años salieron diez números de la revista La Cachimba y trece (la yeta) plaquetas con diversos autores.
Colussi, Isaías y Pidello siguieron como coeditores de Ediciones La Cachimba, con multitud de títulos en su haber, hasta el año 1995.
En el libro Poesías por entregas: Las Plaquetas de la Cachimba, PcH Editorial, Rosario, 2022, Paola Chinazzo realiza un verdadero trabajo de investigación historiográfico literario, recolectando las trece plaquetas que se editaron, reseñando la vida y obra de cada uno de los poetas que allí están presentes, y fotografiando cada plaqueta.
Ediciones La Cachimba se integró con tres poetas amigos: Jorge Isaías, Alejandro Pidello y Guillermo Colussi y siempre tuvo una actividad muy prolífica siendo su material impecable. Acceder a este material permite dimensionar la actividad artístico cultural de la ciudad de Rosario en los años ’70, años de ebullición productiva en toda Latinoamérica.
Destaca la cantidad de dibujos, collages, grabados y obra plástica de Alejandro Pidello, muchas veces para ilustrar la obra de otros autores, otra para ilustrar la obra propia.
Además se presenta material “de yapa” que incluye fotos, cartas de Beatriz Vallejo y Alfredo Veiravé a Felipe Demauro, fotos de Concepción Bertone, Eduardo D’Anna, Carlos Piccioni, Felipe Demauro y otros poetas en el dossier, “Trazos de la época”.
Cada una de las plaquetas incluye fotos o dibujos, además de los textos de los autores, incluso con algún epígrafe escogido.
Los autores de las plaquetas son Alejandro Pidello (1947, Rosario), Franklin Sandi (La Paz, Bolivia, 1945), Jorge Isaías (Los Quirquinchos, 1946 – Rosario, 2023), Gustavo Verano (Rosario, 1955), Guillermo Colussi (Rosario, 1951), Felipe Demauro (Rosario, 1947), Juan Carlos Salman (Santa Fe, 1941).
Ediciones La Cachimba se llamó así porque tanto Pidello, como Colussi, y sobre todo Isaías fumaban en pipa todo el tiempo. Se le dice Cachimba en el lunfardo, a la pipa rústica y barata que usan los negros.
Si bien la obra de la mayoría de los poetas está muy influenciada por algunas corrientes de vanguardia ya aparecidas hacía tiempo en Europa (modernismo, simbolismo y sobre todo surrealismo), la obra de Jorge Isaías ya aparece desde sus inicios como lo que siempre fue: un canto a la llanura que conformó su tierra, un homenaje a sus mayores, colonos turcos del sur de la Provincia de Santa Fe: una vida de inmigrantes que nunca fue fácil ni gloriosa para nadie, un canto al amor y a la belleza de la vida y de la existencia, más allá de todas las desgracias y sufrimientos.
Jorge Isaías publicó cinco plaquetas: Escaramuzas, Ritos, Crónica de Abdul y otros poemas, Nueva Crónica Gringa y Poeta Itinerante.
Alejandro Pidello publicó tres plaquetas: Alfaomega, María Laura y el segundo nacimiento de la reducción destruida y El viaje en botella sagrada. Es autor de los textos más vanguardistas, impregnados de surrealismo y psicoanálisis, en una suerte de condensación épica y heroica con los conceptos más en boga de los intelectuales de la época. Incluso los diseños gráficos que le son propios que acompañan las plaquetas están impregnados del mismo espíritu rupturista y contestatario con la tradición plástica y literaria conservadora.
Guillermo Colussi publica la plaqueta número 7 en la que aparecen poemas despojados de lirismo que aluden al conflicto existencial del hombre en su situación, en una encrucijada propia de la vida y del destino, que el hombre por sí mismo no puede gobernar ni que tampoco lo hace feliz.
A modo de cierre, la autora de este ensayo, Paola Chinazzo señala que “la heterogeneidad escrituraria evidenciada en la colección se esgrime tanto individualmente como grupalmente”.
“La suma de estilos que presentan las plaquetas nos muestra el vínculo que cada poeta mantenía con el lenguaje, con su cultura y sociedad y deja una gama de tonalidades que van desde lo más claro, conciso y referencial hasta lo más hermético, difuso y simbólico. En todos los casos, nos queda por apreciar el juego que abren los valores plásticos y sensoriales de las imágenes, el encadenamiento de metáforas, la variedad de registros lingüísticos y la amplitud estilística desplegados en los versos.”
Poder leer las plaquetas originales tal cual salieron en su momento es un enorme placer para quienes deseen saber qué pasaba con la literatura de la ciudad por esos años. Con un rigor propio del investigador científico, Chinazzo hurga y cosecha las plaquetas originales agregando obras plásticas, fotos y artículos periodísticos, incluso cartas de los poetas más célebres de esa época.
Volviendo el tiempo atrás y en las vicisitudes propias de la coyuntura histórico-política de la época, Paola Chinazzo concluye:“ Vale decir que, por aquel entonces, el lugar que ocupaba el discurso poético dentro de las expresiones culturales era importante, puesto que fue concebido como herramienta y medio para incidir revolucionariamente sobre la realidad.”
Es un libro de lectura indispensable para quienes aman las letras de esta ciudad.