El Gobierno se sentó en la mesa de negociación paritaria con los sindicatos de trabajadores estatales nacionales, pero fue una simple formalidad ya que no presentó una oferta formal para actualizar el salario del sector. Luego de eso se decidió llamar a un cuarto intermedio y realizar un nuevo encuentro que será en los primeros días de enero. La reunión se realizó al mediodía y por Zoom, con la presencia de autoridades de los dos sindicatos del sector, UPCN (Unión del Personal Civil de la Nación) y la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE).
"El Gobierno busca dilatar los tiempos. Está claro que los tiempos del Gobierno no se corresponden con las necesidades urgentes que tienen los trabajadores. Es evidente que a estos funcionarios les sobra plata para llegar a fin de mes", se quejó el titular de ATE, Rodolfo Aguiar en las redes sociales. Según este sindicato, durante 2024 tuvieron una suba salarial del 73 por ciento, mientras que la inflación, aún sin conocer el dato de diciembre, superó el 112 por ciento.
El dirigente insistió en que "el Ejecutivo mantiene su estrategia de retardar los incrementos y de esa manera seguir ajustando los salarios en el Sector Público". En ese sentido, Aguiar advirtió que decidieron aceptar el cuarto intermedio "con el único propósito de que esta instancia se mantenga abierta y por lo tanto cualquier posible aumento impacte con los haberes de enero", indicó.
En ese sentido el titular nacional del gremio afirmó que "desde ATE vamos a seguir exigiendo una suma fija que permita recuperar los salarios más bajos de la administración pública y compense de esta manera todo lo perdido durante el 2024. Desde que asumió el actual Presidente, nuestro poder adquisitivo se vio afectado por lo menos en un 40% en relación a la evolución que mostraron los precios", señaló.
Final esperado
Todos los participantes sabían que la reunión no iba a llegar a buen puerto. Entre los dirigentes sindicales había un convencimiento de que "la paritaria viene muy complicada. Era difícil alcanzar un acuerdo”.
Incluso los delegados paritarios cuestionaron el día de la convocatoria y señalaron que fue parte de la estrategia del secretario de Trabajo, Julio Cordero, que convocó a la reunión en “de forma tardía”. Es más, desde ATE hablan de que este encuentro fue parte de "una nueva teatralización” del gobierno.
La última vez que se negoció un incremento salarial fue el 31 de octubre. Ese día se acordó un incremento del 2 por en el sueldo de noviembre y del 1 por ciento para diciembre, además de una suma fija remunerativa de 30 mil pesos.
En esa oportunidad, ATE firmó en disconformidad. En tanto que UPCN, que conduce Andrés Rodríguez, firmó como siempre sin chistar.
La discusión salarial se produce en un ambiente de tensión ya que este 31 de diciembre vencen algo más de 57 mil contratos dentro del Estado y no hay certeza de cuántos de esos trabajadores tendrán continuidad laboral.
El gobierno libertario vino reduciendo la planta del personal estatal desde que Milei asumió la presidencia. Según información del propio gobierno hay a esta altura 35 mil trabajadores menos en el Estado. Esto es sin contar a los que el Ministerio de Justicia dejó en la calle en estas últimas semanas.
Según funcionarios del gobierno fueron 2400 los despedidos en este ministerio que abarca además a los sitios de Memoria y la Secretaría de Derechos Humanos. La semana pasada se realizó un multitudinario abrazo a la exESMA para repudiar los despidos en esa área.
Por otra parte está el vaciamiento de la Defensoría del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual. Según el ministro de Desregulación , Federico Sturzenegger, ya desvincularon a 104 de los 144 trabajadores que tiene esa dependencia. Todo esto es parte del ajuste que continúa aplicando el gobierno y que por ahora solo ATE resiste dentro de las reparticiones públicas.
