El presidente chino, Xi Jinping, dijo este martes, en su discurso de fin de año, que China podrá "superar los retos económicos, las incertidumbres externas y las presiones de la transición hacia nuevos motores de crecimiento". Lo hizo en un texto en el que enfatizó la unidad de China con Taiwán.
En su mensaje, difundido por la agencia estatal Xinhua, Xi destacó que "la economía mostró mejoras y recuperación" y calificó los logros económicos y sociales de 2024 como una base sólida para afrontar los desafíos del futuro.
Lo más notorio del texto fue la mención a Taiwán. Xi reiteró como en años anteriores que la reunificación con Taiwán es "una aspiración común de los chinos a ambos lados del Estrecho" y una "tendencia histórica que nadie puede detener".
Remarcó que "a través del Estrecho de Taiwán, somos una sola familia" y enfatizó que "nadie puede cortar nuestros lazos de parentesco", reafirmando la unidad entre ambos territorios como parte de la visión histórica de la nación.
Taiwán, la antigua isla de Formosa, se escindió durante la guerra civil que culminó en 1949 con la proclamación de la Republica Popular China. El nacionalista Chiang Kai-shek se refugió con sus fuerzas en la isla, que quedó fuera de la influencia del comunismo. China reclama soberanía sobre Taiwán desde entonces.
Xi subrayó que el Producto Interior Bruto chino se proyecta por encima de los 130 billones de yuanes (17,8 billones de dólares, 17,1 billones de euros), mientras que la producción de grano superó las 700 millones de toneladas, consolidando la autosuficiencia alimentaria.
El presidente cerró su mensaje con un llamado a la unidad y la perseverancia, afirmando que "con esfuerzo y determinación, podemos superar cualquier desafío", y deseó un próspero Año Nuevo en el que cada hogar en China esté lleno de "alegría, paz y esperanza".
