Al menos 15 personas murieron y una veintena resultaron heridas este miércoles en el primer ataque israelí contra la Franja de Gaza del año, mientras que Israel amenazó con intensificar los bombardeos si el grupo islamista palestino Hamas no libera a los rehenes israelíes restantes, capturados durante su ataque el 7 de octubre de 2023.
Primer bombardeo del 2025
El portavoz de la Defensa Civil gazatí, Mahmud Basal, indicó en su canal de Telegram que el reciente bombardeo contra el territorio palestino tuvo lugar durante la madrugada, dirigido contra las residencias de las familias Badra, Abu Warda y Tarush, en la localidad de Yabalia, en norte. "El mundo da la bienvenida al nuevo año con celebraciones, y nosotros damos la bienvenida a 2025 con la primera masacre en la Franja de Gaza", lamentó el portavoz.
Al menos 45.553 personas murieron y otras 108.379 resultaron heridas en el enclave desde que comenzó la guerra, hace casi 15 meses, según las últimas cifras del Ministerio de Sanidad, que estima además que los cuerpos de unos 11.000 desaparecidos siguen enterrados bajo los escombros.
La Defensa Civil gazatí también alertó de la inundación de más de 1.500 tiendas para desplazados en toda la Franja, después de unas fuertes lluvias en los últimos días: 497 tiendas se inundaron en la gobernación de Gaza (norte), 170 en la de Rafah (en el extremo sur), más de 665 en la de Jan Yunis (sur) y otras 210 en Deir al Balah (centro). Los efectos han sido especialmente devastadores en la designada como zona humanitaria de Mawasi, que recorre las costas del sur y el centro de Gaza junto a las urbes de Jan Yunis y Deir al Balah, y donde se refugian la mayoría de los casi dos millones de palestinos de la Franja, sin apenas electricidad ni agua corriente.
El parte israelí
Por su parte, el Ejército israelí dijo haber destruido recientemente un complejo de fabricación de cohetes en Rafah, donde las fuerzas israelíes llevan desde mayo sobre el terreno. El martes, el Ejército anunció el traslado de la brigada Nahal, una de las más activas en Rafah, al norte de la Franja, donde el asedio que comenzó a principios de octubre ya se ha cobrado la vida de unas 3.000 personas, según las autoridades locales, y obligado a miles de palestinos a huir.
El ministro israelí de Defensa, Israel Katz, amenazó con atacar la Franja de Gaza "con una fuerza no vista en mucho tiempo" si Hamas no libera a los rehenes israelíes en el enclave ni deja de lanzar cohetes contra Israel, en declaraciones recogidas por los medios locales. "Israel intensificará sus actividades contra las guaridas terroristas de Gaza hasta la liberación de los rehenes y la eliminación de Hamas", dijo Katz durante una visita a la localidad israelí de Netivot, en el sur del país.
Casi al mismo tiempo, el portavoz en lengua árabe del Ejército israelí, Avichay Adraee, alertó a los residentes de varias zonas de la localidad de Yabalia, para que abandonen la zona antes de que las fuerzas lanzaran nuevos ataques. En las primeras horas del día milicianos del grupo islamista dispararon dos cohetes contra Israel, uno de los cuales fue interceptado mientras que el otro cayó en una zona despoblada, sin causar heridos. Los lanzamientos desde Gaza contra comunidades israelíes son relativamente infrecuentes, aunque en la última semana se han producido varios desde el norte del enclave, a pesar de la ofensiva que las tropas israelíes mantienen en la zona desde principios de octubre.
Negociaciones estancadas
Estas declaraciones llegan en un momento de estancamiento en las negociaciones para un alto el fuego en el enclave que permita liberar a los rehenes israelíes que todavía permanecen secuestrados a cambio de presos palestinos en cárceles de Israel, informó a la agencia de noticias EFE una fuente de seguridad egipcia conocedora de las conversaciones mediadas por Egipto y Qatar.
De acuerdo con esta misma fuente, que pidió el anonimato por la sensibilidad del asunto, ni Israel ni Hamas anunciaron el fracaso de las comunicaciones, pero indicaron que efectivamente hubo un retraso debido a las dificultades para alcanzar un acuerdo en puntos como el intercambio de prisioneros, que esperan resolver en las próximas semanas. Por ello, según el informante, las estimaciones indican que el acuerdo no se implementará antes de que Donald Trump asuma la presidencia de Estados Unidos el 20 de enero, dado que las negociaciones están dilatadas en la cuestión del número de rehenes israelíes y prisioneros palestinos que serán liberados, dificultades que los mediadores tratarán de resolver durante este periodo.
El principal obstáculo para avanzar es que Hamas se niega a liberar a 12 hombres y mujeres israelíes secuestrados y, en cambio, exige la devolución de 12 cuerpos de hombres secuestrados, señaló la fuente. "Hasta ahora, Israel ha proporcionado a Hamas una lista de 34 prisioneros como parte del acuerdo propuesto. Hamas aprobó 22 nombres de la lista, pero pidió que los 12 restantes sean sustituidos por cuerpos, pero la delegación israelí se negó a incluir los cuerpos de los secuestrados en la lista de los 34 nombres", explicó. "Además, Israel insiste en que en cualquier acuerdo sólo aceptará rehenes vivos y se ha negado a aceptar la liberación de algunos prisioneros palestinos que Hamas exigió que se incluyeran en la lista de sentencias largas, como Al Barghouti y Ahmed Saadat", agregó.