El exdiputado nacional y exembajador argentino ante la OEA, Carlos Raimundi, analizó el presente coyuntural de la Argentina y la respuesta que tiene que haber desde el lado del campo nacional y popular ante las políticas de destrucción del Estado por parte del Gobierno de Javier Milei.

En este marco y ante el cierre del Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti, que tiene su sede en el Espacio Memoria y Derechos Humanos que funciona en lo que fue el campo de concentración de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), Raimundi señaló que “tenemos que estar movilizados y presentes”, porque estos son “espacios que el Estado utiliza para sostener viva la conciencia, la memoria, entonces cuando se ataca eso, se ataca simbólicamente lo que representan”.

“Cuando volvamos a hacer cargo, vamos a tener que recomponer de nuevo. Pero tenemos que asumir nuestra derrota, que es muy profunda”, señaló en la 750.

“Otras veces nos han ganado, pero lo que estaba bien, estaba bien y lo que estaba mal, estaba mal. Ahora parece que lo que estaba bien, está mal. Hay una especie de caos en el lenguaje, en el sentido, en la interpretación en donde todo vale. Tenemos que dar una batalla muy fuerte para recomponernos nosotros mismos”, remarcó.

De esta manera, para el exdiputado nacional, la respuesta del campo nacional y popular tiene que ir “por dos caminos”.

“Uno es ofrecer un programa, pero con la contundencia que sea creíble y confiable. Y segundo, es lo que estamos haciendo un grupo de militantes y dirigentes en todo el país, que es desescalar los conflictos que no son por proyecto”, explicó.

“Entiendo que puede haber diferencias al interior de un proyecto, pero hay que ponerlas en el lugar que corresponde, que no es la tapa de los diarios, sino en reuniones que hay que resolver. Nuestra militancia está sufriendo nuestras internas, por nombres y no por proyectos. Primero la Patria. Y aunque es difícil, porque está fragmentado, hay que reconstituir el sujeto pueblo”, cerró.