Cuatro días después de que el vocero presidencial Manuel Adorni dijera en conferencia de prensa que “los asesinatos de mujeres se redujeron en más de un 10 por ciento”, familiares de víctimas de femicidios marcharon de Congreso a Plaza de Mayo, con una bandera de más de 50 metros, con los nombres de las víctimas de 2024. Según el Observatorio contra la violencia patriarcal Lucía Pérez, fueron 316 los femicidios que se registraron en 2024 y 184 niñeces quedaron huérfanes de madre.

Por otra parte, y transversalizando cifras que no cuentan más que con el trabajo a pulmón de activistas feministas, según el relevamiento del Observatorio Adriana Marisel Zambrano de la Casa del Encuentro, en diciembre hubo 34 víctimas de violencia de género, 26 niñeces quedaron sin madre, de las cuales, el 52 por ciento son menores de edad. El 50 por ciento de los agresores eran parejas o ex parejas. Durante este año de gobierno de La Libertad Avanza, no sólo Milei ordenó el cierre del Ministerio de Mujeres y Diversidades a nivel nacional, sino que se desmantelaron casi todos los programas que trabajaban en la defensa de los derechos de las mujeres y de las diversidades, como el Acompañar y las líneas de atención a víctimas de violencia.

Días antes del anuncio presidencial, en Salta, Reinaldo Román, cacique de su comunidad, pedía justicia por el femicidio de su hija Edith Román, de 17 años. Mientras unos pescadores buscaban carnada, encontraron el cuerpo de Edith en una zanja del Río Pilcomayo, territorio de la comunidad indígena wichí, ubicada en el límite con Paraguay y Bolivia. Si bien la adolescente era de la Comunidad Betania, vivía con su hermana en San Anselmo (a siete kilómetros), para poder ir a la escuela.

Los pescadores encontraron su cuerpo desnudo y con golpes en la madrugada del 13 de diciembre, en la Comunidad Misión La Gracia, cerca de La Estrella, a 500 kilómetros de Salta capital. Pero la noticia del femicidio llegó a su padre recién al mediodía del sábado 14. “Salí enseguida a buscarla, en medio de una gran tormenta de tierra y agua y llegué a las 14 al lugar. Encontramos su cuerpito tirado en un canal ahí, cerca de la comunidad, desnuda y con muchos golpes. Tenía signos de abuso y la tiraron a ese lugar lleno de agua”, dijo a Las12 Reinaldo Román.

“Ella les tenía mucha confianza, iban a jugar a la pelota juntos, porque eran parientes nuestros”, agregó Reinaldo desde Salta, en referencia a los 4 detenidos acusados por el abuso y el femicidio. La autopsia reveló que su muerte fue por asfixia por inmersión y que fue abusada sexualmente. Según informó el Ministerio Público Fiscal de Salta: “Presentaba traumatismo encéfalo-craneano, politraumatismos en distintas partes del cuerpo y heridas compatibles con abuso sexual”.

De los 4 detenidos, 3 son mayores de edad y uno de ellos tiene 15 años, todos viven en comunidades originarias de la zona. Reinaldo dijo además que según una testigo del hecho, habría dos involucrados más. Román contó que la violencia de género es moneda corriente en estas comunidades donde reina la pobreza, el desamparo y la falta de instituciones del Estado. Sus casas están hechas de lona y palos de madera y a esas regiones sólo llega el viento.

El 30 de diciembre, familiares de víctimas de femicidios marcharon a Casa Rosada. Foto: Julio Mancini. 

El desamparo tiene nombres y apellidos

“Entiendo que son tiempos de fiesta y están tomando descanso pero necesitamos que actúen y por ahora nada: tengo miedo que pase algo grave en estas comunidades”, dice a Las12 Reinaldo Román. La falta de instituciones del Estado interviniendo, la estigmatización y el clima que instala un gobierno que hizo del odio su principal bandera, agravan la situación. Reinaldo contó que en su comunidad la policía no tiene movilidad propia y están desde hace años reclamando que exista una comisaría. Cuando ocurrió el femicidio de Edith, la policía llegó a las 15, mientras que el equipo de criminalística, que iba desde Orán, a 300 kilómetros, arribó al lugar recién a la medianoche.

La periodista feminista salteña, Silvia Noviasky, viene cubriendo estas problemáticas desde hace años: "La palabra “chineo” llegó a los medios nacionales a partir del Caso Juana, la nena Wichi abusada a la que se le negaba abortar. La fallecida lideresa Wichi Octorina Zamora renegó de la palabra y pidió dejar de llamar de esa manera a lo que en las ciudades se llamaba “abuso en banda”. El reclamo apuntaba a que se dejara de mirar diferente lo que pasaba y pasa en las comunidades más alejadas del norte del país; a que los medios, la justicia y la sociedad toda les diéramos la misma posibilidad de acceso a los derechos, la misma calificación para cuando se viola a las mujeres de las comunidades y la misma visibilidad al asesinato y violación de una mujer originaria, criolla o de la ciudad. Pero aún no lo logramos".

En relación al abuso en banda y femicidio de Edith se supo poco y nada, dice Silvia. "Otro sería el tratamiento mediático si hubiese sucedido en el medio de una plaza porteña, hoy tendríamos como en loop los titulares de los noticieros nacionales diciendo que “se habrían drogado a dos mujeres más y que se buscan dos criollos en moto”. Pero esos titulares no se logran fácilmente, y por estos “días festivos” el papá de Edith se agota buscando que otras mujeres testifiquen, también en cómo llegar a pagar los largos viajes hasta las oficinas judiciales. En los mismos pasillos judiciales cruzan sin respuesta las mujeres wichis que denunciaron en el 2022 haber sido abusadas: fue la primera Asamblea de Mujeres Originarias que rompió el silencio de los abusos sufridos por hasta tres generaciones. Y si bien se rompió el silencio en las comunidades, no pasó en lo mismo en los pasillos judiciales en los que más que respuestas de la justicia hay wichis buscando dinero para el boleto de vuelta a sus comunidades". Las agrupaciones feministas salteñas denuncian que el Ministerio Público Fiscal no brinda información, no lo hicieron cuando les consultaron sobre los abusos de mujeres wichis y no lo hacen ahora con otras consultas.

No son solo cifras pero al gobierno no le importa

Entre el 1° de enero y el 31 de octubre de 2023, la Casa del Encuentro contabilizó 243 femicidios en todo el país y 275 en el mismo período de 2024: los números demuestran que no sólo no disminuyeron sino que aumentaron un 13,2 por ciento. Y el Observatorio Lucía Pérez cuenta 118 mujeres desaparecidas en todo el país.

“Adorni está mintiendo, no tiene nada que ver con ninguna información fehaciente. Ellos en su marco de la comprensión de la realidad mercantilizan todos los órdenes de la vida, piensan que menos inversión pública, es menos femicidios, pero es todo mentira. Necesitamos más prevención, mejores condiciones de vida del conjunto de la población, más programas, más presencia del Estado porque si eso disminuye, genera malestares que se traducen en violencias. Los femicidios aumentaron, no bajaron en 2024”, dijo la ministra de Mujeres y Diversidades de la Provincia de Buenos Aires, Estela Díaz en entrevista con el programa de Radio con vos La inmensa minoría, un día después de las declaraciones del vocero presidencial.

Díaz señaló además que los programas que estaban bajo la órbita del Ministerio de Mujeres y Diversidades de la Nación pasaron al de Justicia y Derechos Humanos en donde ya se despidieron más de 2000 personas: “Por primera vez en 30 años no tenemos en el Gobierno Nacional un órgano institucional responsable del abordaje de la violencia de género”. El cierre del Ministerio de las Mujeres, Género y Diversidad, así como del programa Acompañar y la reducción de los y las trabajadoras de la Línea 144 dejaron en total desprotección a miles de mujeres, niñeces y adolescencias, explican. Además, el ministerio no trabajaba solo para erradicar las violencias y los femicidios sino también para que miles de personas tuvieran una mejor calidad de vida a través de programas de inserción laboral, reducir los embarazos en la adolescencia, entre otros.

El movimiento popular Mumalá registró que el 11 por ciento de los femicidas tenía antecedentes penales por violencia de género y que un 5 por ciento pertenecía a las fuerzas de seguridad. Acorde a las investigaciones de este observatorio, la provincia con mayor tasa de femicidios es Chaco y le siguen, Misiones, Santa Cruz, Jujuy y luego, Santa Fe y Santiago del Estero. Según Mumalá, “el 80 por ciento de los femicidios son cometidos por conocidos de la víctima, el 35 por ciento fueron asesinadas con armas blancas y el 56 por ciento en sus viviendas”.

En este contexto, explican desde Ahora que sí nos ven: “El gobierno de Milei fue el único en votar en contra de la resolución de la Asamblea de la ONU para la prevención y la eliminación de todas las formas de violencia contra las mujeres y niñas. La crueldad como marca de época se hace presente en todos los casos, pero durante el mes de noviembre hubo dos femicidios contra niñas de 8 años que conmocionaron a la sociedad. Uno ocurrió en Córdoba y el otro en Misiones. Aralí Vivas y Fabiana Sirino fueron abusadas sexualmente y luego asesinadas, en ambos casos por hombres cercanos y conocidos. También en noviembre Rita Pilar Almirón, mujer trans, fue asesinada por su pareja, Carlos Romero, en Entre Ríos, y en Bahía Blanca se investiga el posible transfemicidio de la activista Rosario Sansone”. El femicidio de Nora Dalmasso y la desaparición de María Cash, ocurridos hace 18 y 10 años, todavía no tienen justicia, así como tantos otros, algunos emblemáticos, otros olvidados. El padre de María murió  buscando a su hija en total soledad y Nora fue revictimizada y culpabilizada por su propia muerte al tiempo que su nombre sufrió toda clase de escarnio público por haberse encontrado en una situación de intimidad.

El movimiento feminista revolucionó las últimas décadas de la construcción política y no son pocas las lecturas que lo incluyen como principal enemigo de los gobiernos de neo derecha. Milei lo deja muy claro con sus políticas y sus dichos, pero tal vez no esté al tanto de que el camino recorrido es mucho y que las respuestas de tanta crueldad y desidia se van a hacer notar en mucho menos tiempo de lo que el gobierno libertario es capaz de calcular.