El exlegislador porteño y dirigente del MST, Alejandro Bodart, salió al cruce de los jueces de la Sala II de la Cámara Peanl, Penal Juvenil, Contravencional y de Faltas de la Ciudad que revocó un fallo de primera instancia y lo condenó a seis meses de prisión en suspenso por una serie de declaraciones de 2022 en las que calificó a Israel como un “Estado racista y genocida” por la ofensiva bélica en la Franja de Gaza.

Bodart consideró la condena como una “barbaridad” y anticipó a la 750 que apelará el fallo, al tiempo que cuestionó al tribunal, que votó en disidencia al revocar la absolución que en primera instancia había recibido el dirigente de izquierda, en una causa originada a partir de una denuncia de la Delegación de Asociaciones Israelitas rgentinas (DAIA).

“Fue por opinar en contra de un genocidio”, se defendió Bodart, que recordó que la denuncia surgió en 2022, a partir de una serie de mensajes publicados en la red social X (antes Twitter). “El primer juez no encontró delito y la descartó. La segunda instancia incluyó un juicio, presentamos testigos prestigiosos, como el Premio Nóbel de la Paz (Adolfo) Pérez Esquivel e integrantes de la comunidad judía. También fui absuelto. Y sin embargo, las apelaciones siempre encuentran algún tribunal”, se quejó.

El mensaje que desató la denuncia de la DAIA decía: “Sionistas=Nazis” y “74 años de la catástrofe que vive el pueblo palestino, a manos del Estado racista y genocida de Israel”. También dijo que “la llave, símbolo de sus casas y tierras robadas, está presente en cada lucha. Por una Palestina laica, democrática, del río al mar”. Esta última frase - “del río al mar” - es una consigna del nacionalismo palestino que reclama por el restablecimiento de un solo Estado, que incluya desde el río Jordán hasta el mar Mediterráneo.

La denuncia contra Bodart era por “violar la ley Antidiscriminatoria”. En una carta documento, la DAIA le exigió al exlegislador porteño que se rectificara de comparar al sionismo con el nazismo. En tanto, para Bodart, “intentan instalar que los que defendemos al pueblo de Palestina y condenamos el genocidio de Israel somos antisemitas”.

El fallo que lo condenó a seis meses de prisión en suspenso “constituye una narrativa que proporciona las bases para deslegitimar la existencia de Israel” y “realizar un llamado a su destrucción que va más allá de cualquier opinión” o “crítica contra las acciones tomadas por las autoridades del país”, según la resolución del tribunal, que concluyó que “bajo el ropaje de críticas legítimas”, Bodart “despliegua un arsenal discursivo discriminatorio que contiene una comparación del movimiento político sionista con el nazismo”.