El joven Lucas Mercado, de 19 años, murió este viernes en circunstancias poco claras cuando, en presencia de policías que lo escoltaban, pedía asistencia en el Hospital de Salud Mental Miguel Ragone de la ciudad de Salta. El fiscal penal de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas, Gabriel González está a cargo de la investigación.

Beatriz, tía del joven fallecido, dijo que su sobrino se encontraba en un estado de crisis de ansiedad y pánico cuando se dirigió a la guardia del Hospital Ragone, donde "no lo quisieron atender la primera vez". 

La secuencia de los hechos no está muy clara, pero se supo que hubo una intervención policial, que en estos momentos está siendo cuestionada por los familiares. Entre otras cosas, reprochan que la madre con su marido y otro hijo fueron llevados a un destacamento policial mientras que un grupo de policías se quedó con Lucas. 

Un escueto parte de prensa del Ministerio Público Fiscal de Salta informó que el joven se encontraba "en la vía pública, en la intersección de la Avenida Yrigoyen y Pedro Pardo, en estado de excitación, con una conducta errática y al llegar un móvil policial subió de forma voluntaria y fue trasladado al hospital Ragone, donde falleció antes de poder ser asistido".

Sin embargo, la tía del joven dijo en declaraciones públicas que el padre de Lucas "está remolesto" porque entiende que hubo "negligencia". Señaló que a su hermano le parece "ilógico" que en esas circunstancias hayan llevado a la madre de Lucas a otro lugar, "sabiendo que su hijo está en crisis y que la madre lo puede calmar". Añadió que la mujer fue llevada a un destacamiento policial, donde "estuvo ahí con su hijito y con su marido", "lo dejaron solo a él (a Lucas) con la policía y pasó todo eso y ya cuando vino le dijeron que murió".

Beatriz ratificó que cuando la madre fue al Hospital Ragone "ya le dijeron que (Lucas) murió". "La policía solamente dice que lo trajeron para acá de vuelta (al Ragone), para que lo atiendan, porque él pedía que lo lleven al (Hospital) San Bernardo, y de ahí es como que él no quería venir para acá y se resistía (...), no sé qué pasó", sostuvo la tía. También indicó que la madre del joven solo alcanzó a verle un raspón y quería ver el cuerpo para revisar "si tiene golpes" o "si le hicieron algo".

Beatriz dijo que la madre de Lucas lamenta que "no lo pudo acompañar, ella dice, 'lo hubiera llevado al San Bernardo, le hubiera pedido a la policía que lo llevara al San Bernardo". 

Según reveló la mujer, su sobrino Lucas estaba con tratamiento psicológico y psiquiátrico y era asistido por el programa Puente del Centro Provincial de Recuperación de Adicciones.

El fiscal González dispuso el relevamiento de testigos, análisis de cámaras de seguridad y el traslado del fallecido al Servicio de Tanatología Forense del Cuerpo de Investigaciones Fiscales para realizar la autopsia. También ordenó que los policías que participaron de la intervención con Lucas fueran trasladados al CIF, "para realizar las diligencias de rigor". 

El presidente del Comité Provincial de Prevención de la Tortura, Rodrigo Solá, informó a Salta/12 que se pusieron a disposición de la Fiscalía que lleva adelante la investigación y harán aportes de contexto.