Luis Suárez, figura emblemática del fútbol uruguayo y compañero de Lionel Messi en el Inter Miami de la MLS, parecer ser más que una estrella del futbol: es también un hombre con sentido de la empatía y un gran sentido de la escucha. Durante sus vacaciones, intervino para evitar que un hombre de 49 años se quitara la vida en una playa de la Ciudad de la Costa, en el departamento de Canelones, Uruguay.
El episodio ocurrió cuando Suárez caminaba junto a su esposa, Sofía Balbi, y se percató de la delicada situación.
El hombre había permanecido casi un día encaramado en un árbol, con una soga atada al cuello, amenazando con lanzarse desde seis metros de altura, de acuerdo con Montevideo Portal.
Según el parte policial difundido por Prefectura, el hombre manifestó que, “si su pareja, una mujer de 53 años, no se presenta en el lugar, se quitará la vida”. Al llegar al lugar, las autoridades constataron que el individuo se encontraba desarmado, aunque tenía una cuerda consigo y la había atado a su cuello.
Andrea, integrante de una ONG especializada en crisis emocionales, describió el papel crucial que jugó el futbolista: "Luis me confirmó que es una persona muy humana. Estuvimos abrazando y hablando con este otro Luis que estaba arriba del árbol. Le pedíamos que encontrara un sentido para seguir adelante".
Las negociaciones duraron 18 horas, en un ambiente tenso y marcado por el frío de la noche. Finalmente, el hombre accedió a bajar del árbol gracias a la intervención de Suárez, la ONG y las autoridades de la Guardia Republicana y la Prefectura.
“Se acercó Suárez y lo que hicimos fue, en ese tiempo de contención, tratar de charlar de una forma empática y cercana para que no se hiciera tan prolongado, más allá de que desde ayer este hombre está ahí luchando por su vida”, contó Andrea, al programa Telenoche de Uruguay.
El hombre fue trasladado para recibir atención médica y contención psicológica.