Pasado el primer año de gestión, Maximiliano Pullaro paga a sus socios políticos con la distribución de algunos cargos, y sigue recompensando a su antecesor Omar Perotti y a su espacio, Hacemos Santa Fe, como prueba del acuerdo vigente y retribución por apoyos en momentos parlamentarios clave. 

Ahora la ronda del reparto corre sobre una segunda línea del organigrama del Poder Ejecutivo: Defensoría del Pueblo, y la Defensoría de Niños, Niñas y Adolescentes. En el primer caso, debe ocuparse la dirección general de la Defensoría, vacante desde 2021, cuando venció el mandato del socialista Raúl Lamberto, que había sido propuesto por el gobernador Miguel Lifschitz. Ahora ese lugar no será para el mismo espacio político del frente Unidos, sino que el depositario es el PRO, en lo puntual, el sector referenciado en Federico Angelini, en base al acuerdo sostenido con Pullaro y también con la vice, Gisela Scaglia, quien preside el partido amarillo. 

Según publicó el portal Letra P, es un hecho que Pullaro enviará en estos días a la Asamblea Legislativa el pliego para cubrir la vacante como ombudsman santafesino con el nombre de Roberto "Tato" Ryan, un militante del PRO alineado a Angelini, es decir, al sector que suele llamarse "halcones", por oposición a las palomas que representa el sector de Scaglia. 

Luego, también expiraron los mandatos de las defensorías adjuntas, es decir, de los ombudsman que se abocan puntualmente de las dos jurisdicciones en que se divide la provincia, norte y sur. Jorge Henn se ocupaba de la Defensoría norte, y Gabriel Savino, como defensor adjunto en Rosario y la región sur. 

La defensoría adjunta del centro norte será ocupada por alguien del mismo sector del radicalismo al que adscribe Henn. El ex vicegobernador no seguirá allí porque el gobierno lo reubicó como subsecretario de Transporte. Podría asumir Javier Díaz, también de la UCR.

Y para el caso de la defensoría adjunta en Rosario, el lugar se reserva para el peronismo de Hacemos Santa Fe, comandado por Perotti. Como prueba del pacto tejido entre el gobernador y el diputado de Rafaela, el Ejecutivo sugerirá a la Legislatura que designe defensora adjunta a la baigorrense Erika Gonnet, exministra de Medio Ambiente durante la gestión anterior, y actual asesora del bloque provincial en Diputados. 

Gonnet se abrió a la política como militante en el PJ de Granadero Baigorria, dentro del espacio que guiaba el intendente y exsecretario de Transporte Alejandro Ramos. Llegó a ser diputada provincial y hubiese sido compañera de fórmula para vicegobernadora con Roberto Mirabella si finalmente éste hubiese seguido en carrera en 2023.

El favor del Ejecutivo al perottismo responde al acuerdo que posibilitó en el tramo final del 2024 que este sector apoyara la ley impulsada por el oficialismo para modificar la composición de la Corte Suprema de Justicia, de seis miembros a siete. De esa manera, Pullaro consiguió hacer mejor pie en el máximo tribunal, ahora con la oportunidad de hacer designar a tres ministros que cubran las vacantes para conformar el cupo. Un operador fiel del gobierno en la Justicia como el exfiscal general Jorge Baclini, una concesión al socialismo con la exfuncionaria Margarita Zabalza, y otra al perottismo, que eligió enviar al abogado santafesino Rubén Weder.

Luego, el bloque de Perotti concedió otro aval clave a los designios del Ejecutivo y la rosca de Unidos en Legislatura: se abrió del mandato del Partido Justicialista y -salvo el diputado Walter Agosto- insistió en votar a favor de la ley de necesidad de reforma constitucional. Sus votos fueron vitales para que salga la ley y que este año sea quizás el de la reforma de la Carta Magna provincial.

Las otras oficinas a cubrir serán concedidas al socialismo, aunque ayer una fuente de ese partido aseguró que el Ejecutivo aún no hizo el ofrecimiento. Se trata de la Defensoría de Niños, Niñas y Adolescentes. La fuente consultada sostuvo que no está definido quién irá a ese lugar que supo ocupar la abogada Analía Colombo.