El Gobierno de la Provincia de Buenos Aires confirmó que ya cuenta con los reactivos necesarios para hacer los estudios para el seguimiento de los portadores de VIH luego de que, a mediados del año pasado, la gestión de Javier Milei dejó de mandar, de la noche a la mañana, los insumos necesarios que correspondían.

Así lo explicó por la 750 el propio ministro de Salud local, Nicolás Kreplak, quien resaltó que dejaron de recibir reactivos de parte de Nación. “No es que nos dijeron que no iban a mandar más. Estuvimos un tiempo sin poder hacer los estudios hasta que pudimos realizar la compra desde la provincia”, resaltó.

“A nosotros nos dicen que Nación va a comprar en algún momento. Nosotros lo hicimos, tardamos unos meses y salimos a anunciar que estaba. Porque los estudios se hacen cada tantos meses. Entonces salimos a avisarle a la comunidad”, añadió.

Este no es un dato menor, ya que, explicó el ministro, hacer el seguimiento de la enfermedad es fundamental para su control: “Estado nacional, por ley, provee a todas las provincias, además de medicamentos para el VIH, una serie de estudios muy importantes. Por ejemplo, para medir la carga viral o las defensas”.

“La cuestión es que el VIH sabemos que se previene usando preservativos. Pero también el tratamiento es muy eficaz. Y en ese momento, la carga viral desaparece y no contagia. Entonces, mantener la carga viral es muy importante para controlar la epidemia”, afirmó Kreplak sobre los estudios.

“Hay que volver a controlar el VIH, porque es muy peligroso abandonar el seguimiento epidemiológico. Por ahí hay una concepción del sistema de salud muy centrada en lo asistencial y lo privado, como si fuera solo atender enfermedades, y todo el seguimiento lo hace el sector público”, enfatizó.

Este seguimiento y planificación a largo plazo no puede realizar con seriedad si el Gobierno, de un momento a otro, corta programas, tal como, recordó el funcionario, pasó con la Dirección de Asistencia Directa por Situaciones Especiales (DADSE), donde se dejaron de enviar medicamentos a las provincias.

“Hay que trabajar con mucha planificación. Hay que garantizar que la salud esté mejor. Y hay que advertir que la contracara de cuando dicen que hay que hacer un ajuste es esto. Esto lo hace gente que trabaja en los distintos programas, haciendo todo el seguimiento, las compras, la distribución. Cuando se ajusta en esto, la consecuencia es que la población tiene menor salud”, finalizó.