Durante la segunda jornada del histórico juicio en los Tribunales de la ciudad de Córdoba por la muerte de cinco bebés y los intentos de homicidio de otros ocho recién nacidos en el Hospital Materno Neonatal, la principal acusada, la exenfermera obstétrica Brenda Agüero, se declaró inocente ante el Tribunal, y afirmó que a raíz de la tragedia, "hoy no podría volver a tocar un niño".
La mujer, que se encuentra detenida desde agosto de 2022, trabajó en el área de Obstetricia del hospital, y tras los sucesos denunciados, enfrenta cargos por "homicidio calificado por procedimiento insidioso" y "tentativa de homicidio" en los casos de los bebés que sobrevivieron. Según la acusación, Agüero habría inyectado potasio u otras sustancias letales a los recién nacidos, provocando la muerte de algunos y graves cuadros de hiperpotasemia en otros.
En tanto, tras la crisis de llanto que tuvo antes del inicio de la audiencia de este lunes, Agüero afirmó este martes que estaba en condiciones de declarar, e hizo lo propio pasadas las 9.30. Al comienzo contestó preguntas de parte del Tribunal respecto de sus datos personales y su trayectoria como profesional de enfermería.
“No entiendo cómo una persona sana que nunca tuvo problemas que de pronto salga a matar. Los periodistas inventaron esa imagen, gracias a eso yo me veo en ese contexto, eso tiene que quedar en claro. Nunca jamás le hice daño a nadie, y mucho menos a un niño, de hecho siempre luché por ingresar a un lugar donde pudiera atender a esos pacientes, a Neonatología”, agregó.
Tras explicar de forma detallada su trayectoria profesional hasta llegar al área de Materno Neonatal del hospital, explicó: "Quedé enamorada de ese hospital, quería trabajar ahí, estaba fascinada".
Agüero señaló que la acusación en su contra marcó un antes y un después en su vida. “Hice de todo por entrar a un área que hoy no podría trabajar. No puedo creer que el lugar por el que tanto luché para entrar, el lugar que tanto amaba, me arruinó la vida”, disparó.
“Hoy no podría volver a tocar un niño, no podría hacerlo, no podría volver a hacer lo que tanto quería y por lo que tanto luché”, finalizó.
Críticas a los medios por la "demonización" de su imagen
Por otro lado, la acusada cuestionó con firmeza cómo fue tratada por los medios de comunicación. “Me hicieron muchísimo daño. Salieron a decir un montón de cosas que no eran ciertas, como que era paciente psiquiátrica. Me hicieron ocho pericias, en ninguna de esas salió nada de lo que decían”, apuntó.
"Las muertes de los bebés existieron, de eso no hay duda. Pero no puede ser que me sigan bombardeando a mí como la culpable de todo eso”, sentenció la mujer.
Al respecto, criticó el tratamiento periodístico del caso, al sostener que agravaron su situación judicial. "No entiendo cómo una persona sana, que nunca tuvo problemas, que de pronto salga a matar. Los periodistas inventaron esa imagen, gracias a eso yo me veo en ese contexto, eso tiene que quedar en claro", enfatizó.
En este marco, la mujer volvió a remarcar que la mediatización del caso le generó graves repercusiones en lo que respecta a su detención en cárcel. "Me decían cosas y me gritaban", recriminó ante el Tribunal.
Tras la detención, la acusada comenzó a estudiar abogacía dentro de la cárcel para contar con "herramientas" para poder "defenderse". "Estoy a pocas materias de terminar el primer año", confirmó.
Al mismo tiempo, aseguró que la carrera universitaria le permite salir "del encierro". Por otro lado, contó que dentro de la cárcel realiza tareas de artesanía y asiste a la iglesia católica que tiene el Servicio Penitenciario.
Pasadas las 10.25 finalizó la declaración de Brenda Agüero y, tal como anticipó su abogado, Gustavo Nievas, no respondió preguntas.
El caso de los bebés muertos en el Hospital Neonatal
Los hechos investigados ocurrieron entre marzo y junio de 2022, cuando cinco recién nacidos murieron repentinamente sin haber presentado complicaciones previas. En el mismo período, otros ocho bebés sufrieron cuadros graves de hiperpotasemia, pero lograron recuperarse. Los peritajes determinaron que habían recibido dosis letales de potasio u otras sustancias que no formaban parte de los tratamientos indicados.
La investigación apuntó a Brenda Agüero, quien trabajaba en el área de Obstetricia del hospital, como responsable de estas acciones. Según la fiscalía, la enfermera administró intencionalmente las sustancias que provocaron los desenlaces fatales y puso en riesgo la vida de otros recién nacidos.
Además de Agüero, en la causa también está detenida la exdirectora del hospital Liliana Asís, acusada de "encubrimiento agravado, falsedad ideológica y omisión de deberes de funcionaria pública". También están señalados por encubrimiento e incumplimiento de deberes el exministro de Salud de la provincia, Diego Cardozo, la exjefa de enfermería del hospital, Alicia Beatriz Ariza, el médico Pablo Miguel Carvajal, y el exsubdirector de Gestión Administrativa del Ministerio de Salud, Julio Alejandro Tomás Escudero Salama, entre otros.
Estos exfuncionarios enfrentan acusaciones por encubrimiento agravado, omisión de deberes de funcionario público y falsedad ideológica reiterada, por presuntamente no haber denunciado los hechos a tiempo, lo que habría permitido la continuación de las acciones homicidas.
El proceso judicial se desarrolla en Tribunales II, en la ciudad de Córdoba, con la participación de los fiscales Sergio Ruiz Moreno y Mercedes Ballestrini y un jurado popular compuesto por ocho titulares y 12 suplentes. Este lunes, uno de los titulares debió ser reemplazado porque padece dengue.
El juicio es considerado uno de los más relevantes de la provincia por la cantidad de imputados y por la aplicación del sistema de jurado popular. La expectativa está puesta en que el proceso permita esclarecer los hechos y brindar respuestas a las familias de las víctimas. Se espera que dure unos seis meses y declaren más de 280 testigos.