La Confederación General del Trabajo (CGT) repudió el ataque del Gobierno Nacional a las políticas de Memoria, Verdad y Justicia. La Secretaría de Derechos Humanos emitió ayer un comunicado en rechazo a los despidos en los sitios de memoria y al cierre del Centro Cultural Haroldo Conti, que ordenó el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Alberto Baños. Desde la central obrera manifestaron su solidaridad con los trabajadores cesanteados y denunciaron que el avance negacionista del gobierno de Javier Milei pretende la “destrucción de las políticas" que fueron "conquistadas por el pueblo argentino”.
En el texto, que lleva la firma de los co-secretarios Julio Piumato y Maia Volcovinsky, la CGT expresó su enérgico rechazo a "los despidos y la suspensión masiva de trabajadores y trabajadoras dependientes de esa Secretaría" y denunció que la gestión de La Libertad Avanza busca poner fin a lo construído a "lo largo de cuatro décadas de democracia" con políticas que "son reconocidas mundialmente”.
A su vez, desde la CGT manifestaron su repudio por el cierre del centro cultural que funciona en el predio de la ex ESMA, y señalaron que el vaciamiento del Conti “afecta las tareas de investigación histórica" para los juicios de lesa humanidad, además de vulnerar "la transmisión de la memoria y la política reparatoria en cumplimiento de la legislación nacional”.
Por otra parte, expresaron su solidaridad con los trabajadores despedidos y se plegaron "a la lucha de los organismos de derechos humanos para denunciar ante los tribunales nacionales y los organismos internacionales estas políticas que derivan en graves violaciones a los derechos humanos y sociales".