El Ministerio de Trabajo de Santa Fe dictó ayer la conciliación obligatoria por 15 días -hasta el 29 de enero- en el conflicto entre la empresa productora de tripa animal Europlus Argentina y el Sindicato de la Industria de la Carne, por lo que se retrotrajeron temporalmente los 70 despidos realizados por la firma vía Whatsapp y el gremio levantó la medida de fuerza que paralizó desde el martes la planta ubicada en Villa Gobernador Gálvez. El intendente de esa ciudad, Alberto Ricci, dijo que la situación actual de la industria frigorífica le rememora lo ocurrido en los años 90 y, en consonancia con la compañía, resaltó que “el dólar quieto” complica las exportaciones.

“Muchos trabajadores han sido presionados a aceptar propuestas indemnizatorias que no se ajustan a la ley”, consta en el acta rubricada en la cartera laboral, a la que accedió Rosario/12, y en la que la compañía rechazó ese planteo y justificó los despidos en “la crisis que atraviesa la empresa”, sobre la que no brinda mayores precisiones.

Ante la ausencia de acuerdo entre las partes, Trabajo dictó la conciliación obligatoria por 15 días, que servirán para que los representantes de la tripería Euro y el Sindicato de Carne busquen una salida al conflicto.

Los despidos de unos 70 empleados de la planta que produce tripa animal para la industria farmacéutica y para embutidos se conocieron el lunes 6 de enero por la noche. La empresa, cuyos propietarios desde hace unos años es un grupo de Buenos Aires, que se la compró a los dueños originales, notificó las cesantías de un modo moderno pero heterodoxo: a través de mensajes de Whatsapp. Si bien carecen de valor legal, fue la manera en que Euro avisó a sus trabajadores sobre su destino laboral.

Tras la audiencia de ayer por la mañana en la sede Rosario del Ministerio de Trabajo santafesino, el secretario de organización del Sindicato de la Carne, Mario Morales, dijo que la empresa acudió pero “no presentó ningún papel” acerca de las propuestas indeminizatorias, por lo que desconocen “qué intenciones tienen con los trabajadores”. Además, explicó que Euro intentó hacerles firmar un convenio a algunos empleados que intenta desvincular “para la cancelación de sus funciones”, pero fue rechazado.

A la vez, Morales consideró “poco serio” el modo en que la firma notificó los despidos, porque “lo hacen por Whatsapp y ni siquiera mandan un telegrama”, y puntualizó que fueron cesanteados obreros que estaban de licencia por vacaciones o enfermedad, lo que está prohibido por la ley de contrato de trabajo.

En el acta firmada en Trabajo, el apoderado de la empresa, Elbio Ramos, dijo que Euro “ha efectuado ofrecimientos que cubren la totalidad de los rubros indemnizatorios que por ley corresponden”.

El delegado paritario del sindicato, Walter Navarro, dijo a Rosario/12 que como la empresa no llevó al Ministerio las liquidaciones por concepto indemnizatorio para los despidos que quiere producir, la cartera dictó la conciliación obligatoria. “Mañana debería regresar todo el personal a la planta”, sostuvo, para agregar que el 28 de enero tendrán un encuentro con la empresa para negociar una salida al conflicto.

El intendente de Villa Gobernador Gálvez, Ricci, dijo en declaraciones a Radio Dos que lo ocurrido en Europlus Argentina “se viene repitiendo en la industria frigorífica local”, y recordó los 200 despidos en la planta de Swift de esa ciudad, el año pasado.

El líder político de la ciudad situada al sur de Rosario sostuvo, en lógica empresaria, que “con el dólar quieto no dan los márgenes” para las empresas del sector, que destinan parte de su producción a la exportación. Explicó que en el caso de Europlus, que exporta vísceras, las empresas de “Brasil y Paraguay le sacaron la delantera” en ese mercado. Como en los 90, Brasil vuelve a ser “barato” como destino turístico de quienes pueden viajar, a costa de una industria local que sufre las consecuencias del “veranito” cambiario.