Trabajadores y trabajadoras de la red de subtes porteña marcharon hoy a la sede de Subterráneos de Buenos Aires (Sbase) para reclamar la compra de nuevos trenes para la Línea B. Fue a pocos días de que se cumpla la fecha pautada por Sbase para la apertura de sobres de esa licitación, que ya postergó en varias oportunidades. Los metrodelegados piden que ahora sí se avance con el proceso y advierten sobre la presencia de asbesto en la actual flota, compuesta en un 50 por ciento por las formaciones más viejas de toda la red. 

La columna de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y el Premetro (Agtsyp) se concentró alrededor de las 12 del mediodía de este miércoles en Plaza Miserere y desde allí partió hacia las oficinas de Sbase, ubicadas en Agüero al 48, barrio de Balvanera. La marcha fue encabezada por una bandera que recordaba a los cuatro fallecidos recabados por el gremio por cáncer derivado de la exposición al asbesto: Jorge Pacci, Juan Palmisciano, Jorge Bisquert y Jorge Navarro, fallecido hace tan sólo dos meses. Otra bandera, en tanto, reclamaba que "saquen el asbesto del subte".

En diálogo con Página 12, Roberto Pianelli, secretario general del sindicato, precisó que "el pedido central de la marcha es el de la compra de trenes para la línea B que hace cuatro años venimos reclamando". "Los actuales son trenes que tienen setenta años, que todavía tienen asbesto y que hoy no se pueden cambiar porque no tenemos trenes para el reemplazo de esa línea", agregó. 

La flota de la línea más utilizada de la red, con alrededor de 183 mil pasajeros por día,  cuenta con algo más de 30 formaciones. La mitad de ellos son son los Mitsubishi Eidan Series, que tienen más de medio siglo de vida. Hechos en Japón entre 1954 y 1965, e importados en 1995 desde el Metro de Tokio, conforman todavía la flota de la línea junto a los más nuevos CAF-6000, de fines de los '90. Según los datos del estado de flota actual publicados por Sbase, la línea tiene 16 formaciones de Mitsubishi, los coches más antiguos, por lejos, de toda la red de subte. Pianelli advirtió en este sentido que "hace cuatro años venimos pidiendo esta licitación y recién hace un año decidieron llamarla; ahora estarían presentándose los sobres, pero la apertura ya se postergó cinco veces".

El proceso, en efecto, sufrió varias modificaciones y postergaciones desde que Sbase anunció que encararía el recambio de la flota. En un principio la licitación se pensó para reemplazar sólo a los 16 Mitsubishi con la adquisición de 96 vagones cero kilómetro. Esa compra sufrió distintas postergaciones hasta septiembre del año pasado cuando, tras una nueva prórroga, el GCBA anunció oficialmente la readecuación de la licitación para ampliar la adquisición de material rodante a 174 coches nuevos, en busca ahora de reemplazar toda la flota de la línea y no sólo los Mitsubushi.

Esa nueva licitación tuvo una primera fecha de apertura de sobres pautada para principios de diciembre, pero volvió a sufrir una nueva postergación. Entonces se pautó una nueva instancia fijada para este viernes 10 de enero, fecha en la que finalmente se conocerían los ofertantes. Tras la movilización, representantes de los y las trabajadoras fueron recibidos por autoridades de Sbase en la sede de Agüero y allí recibieron la confirmación de que el viernes se concretará ese primer paso en el proceso licitatorio: "Nos dijeron que no va a haber postergación y que después de eso se definiría cómo sigue el proceso de licitación", dijo Pianelli a este diario y agregó que en la reunión también se pidió el recambio de trenes de la Línea C. 

Página 12 consultó a fuentes de Sbase sobre la situación y confirmaron la reunión de esta tarde entre los metrodelegados con el presidente de la empresa estatal, Javier Ibáñez. También ratificaron que la fecha de apertura de sobres sigue firme para este viernes 10. Sobre el asbesto en los coches Mitsubishi, Sbase continúa sosteniendo que el plan de remoción del material cancerígeno está completo para esas formaciones. 

La apertura de sobres es sólo el punto de partida de un largo proceso licitatorio. Además de la selección de la empresa que proveerá los trenes se deberá destinar una partida específica para pagarlos. El presupuesto estipulado hasta el momento para la licitación es de 294 millones de dólares y el plazo total fijado para la incorporación del total de los 174 coches es de cuatro años a partir de que se firme el acta - acuerdo de la licitación. No se descarta, sin embargo, que en el medio de ese período puedan ir sumándose los primeros trenes que lleguen al país. 

Además de la necesaria renovación de la flota por su antigüedad, la compra de los nuevos trenes es necesaria para completar el cien por ciento de servicio de aire acondicionado en la Línea B. Los Mitsubishi tienen ventiladores, por lo que hoy en día la línea tiene sólo el 46 por ciento de sus formaciones con aire acondicionado. Los pliegos de la licitación estipulan también que los nuevos coches a comprar deberán contar con cámaras de seguridad, un sistema de información visual y auditivo e iluminación led antivandálica, mientras que también se prevén obras de infraestructura para incrementa la potencia de la catenaria de la línea.