Mauricio Macri dijo públicamente que sí a la propuesta de matrimonio político que ayer le hiciera Javier Milei. “Estamos dispuestos a conformar un equipo de trabajo conjuntamente con quien vos dispongas”, respondió el expresidente al dejar clara su voluntad de recomenzar las negociaciones que desde hace semanas habían quedado truncadas por las pretensiones de máxima y la estrategia individual que había diseñado La Libertad Avanza (LLA).

El objetivo clave para un eventual acuerdo electoral en el que ambos coincidieron fue uno: “Que el kirchnerismo nunca más vuelva a gobernar el país”. Así lo dijo el expresidente parafraseando la máxima que ayer había expresado Milei durante una entrevista periodística: “Vayamos juntos y arrasemos al kirchnerismo en las próximas elecciones”.

Macri definió que Cristian Ritondo, Ana Clara Romero, Silvia Lospennato, Hernán Lacunza y Soledad Martínez serán los encargados de negociar en representación del PRO.

"Querido Javier"

La respuesta de Mauricio Macri fue lanzada a través de las redes sociales, el terreno predilecto para los comunicados y la propaganga política de los partidos conservadores. “Querido Javier”, comienza la breve misiva.

“Desde el PRO siempre vamos a estar del lado de los que trabajan para terminar con el populismo, la demagogia y la falta de transparencia”, remarca la declaración pública que abre las puertas a las conversaciones sobre pretensiones, condiciones, lineamientos y candidaturas de cara a las legislativas de este año.

En su oferta de hacer un “acuerdo total y en todo el país” con el macrismo, Milei prefirió ayer no hablar de candidaturas. “Primero habría que ver qué intenciones tiene (Macri) de involucrarse activamente en la política partidaria y de cargos”, dijo y se expresó “dispuesto a conversar de este tema con el presidente Macri” (el jefe de Estado insiste en llamar “presidente” a quien ya no lo es, tal la costumbre estadounidense para quienes ostentaron ese cargo; eso sí, no utiliza ese término, por ejemplo, con Cristina Kirchner).

Se abren las negociaciones

Si bien el texto de Macri no explicita parámetros ni condiciones -como sí lo había hecho Milei cuando dejó claro que el acuerdo PRO/LLA debía ser “juntos en todos lados o vamos separados”- hay algunos atisbos que dan cuenta del lugar desde el cual el PRO encarará: “Avanzar en una agenda profunda de cambios y transformaciones que la Argentina aún necesita”. Es decir, más ajustes.

“Nuestras convicciones y coherencia la planteamos tanto en el balotage del 2023 como en el acompañamiento legislativo a lo largo de todo el 2024”, añadió el exmandatario que durante todo el año pasado mandó a sus diputados y senadores a apoyar el desfinanciamiento y endeudamiento del Estado, las persecuciones políticas y los decretos al borde de la constitucionalidad.

Pero la otra lectura de esa frase podría ser la siguiente: la prueba de amor ya fue entregada y, como favor con favor se paga, los que ponemos las condiciones somos nosotros y los que ahora deberán ceder son ustedes.

El presidente del PRO aseguró que, si esos parámetros que se pondrán sobre la mesa de negociaciones se respetan, “este año que comienza podemos representar juntos las banderas del cambio, la libertad y las instituciones”.

O sea que, como en toda organización de boda, faltan arreglar los pormenores. Por lo tanto, las chicanas, las pretensiones y todo lo dicho durante estos últimos meses de cruces mediáticos se deberán recalcular.

La cuestión porteña

En este sentido habrá que ver qué ocurre con algunas estrategias lanzadas durante los días más duros de la confrontación entre el macrismo y el mileísmo, por ejemplo el desdoblamiento de las elecciones porteñas a la que los primos Mauricio y Jorge Macri recurrieron para apretar políticamente a La Libertad Avanza (LLA) en la ciudad.

En su entrevista de ayer el presidente Milei hizo referencia a este tema cuando le pidió al macrismo tener “grandeza” y dejar de “cuidar la quintita” familiar, que es la ciudad de Buenos Aires que gobierna desde hace 18 años.

En ese diálogo radial volvió a poner su condición de ir juntos o separados, sin medias tintas. "Eso de hacerle trampas al electorado, no”, puntualizó e insistió que su “vocación activa” es “ir con un acuerdo total en todo el país” para “terminar con el kirchnerismo”.