Durante el primer año de gestión de Javier Milei el ajuste del gasto de la Administración Pública Nacional (APN) fue equivalente a 4,2 puntos del Producto Bruto Interno (PBI), afectando principalmente áreas sensibles como gasto social, educación, cultura y energía, según el último reporte publicado por el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf).

De esta manera, el gasto devengado de la APN pasó del 19,9 por ciento del PBI a a 15,7 por ciento. El detalle indica que el gasto en promoción y asistencia social se contrajo el equivalente al 0,78 puntos del PBI; el de seguridad social, 0,66; el de educación y cultura, 0,58; y el energía y combustibles, 0,52 puntos.

Casi todos

“Del análisis por finalidad del gasto, surge que de las 29 identificadas, solamente 3 tuvieron un aumento de su peso relativo entre los años 2023 y 2024 y otras 4 mantuvieron el peso relativo de 2023; las 22 finalidades restantes registraron descensos, siendo los más grandes los de Promoción y asistencia social, Seguridad social, Educación y cultura, Energía, combustibles y minería, Transporte y Relaciones interiores”, detalló el informe que calificó como "significativa" a la reducción del gasto de la gestión Milei.

Asimismo, entre esas 6 finalidades aportaron un 80 por ciento de la reducción del peso relativo del gasto de la Administración general en términos del PBI. 

Las que subieron su participación, lo hicieron en magnitudes ínfimas: en Trabajo, 0,08 puntos del PBI (son ocho diez milésimos del PBI, u ocho centésimas de punto de PBI); salud, 0,05 y finanzas e intereses con el 0,01 punto de incremento. 

Las mediciones de la institución fueron realizadas en función del PBI que el año pasado se redujo un 3 por ciento, lo que da como resultado comparaciones en un contexto de una economía más chica. Además, el informe incluyó solo a la APN, es decir la administración central. 

Recién dentro de 10 días se van conocer los resultado finales del 2024, que incluye la totalidad de la administración del Estado: APN, organismos descentralizados, instituciones de la seguridad social, universidades públicas y empresas estatales.

Sin los intereses


De acuerdo a datos de Hacienda, en la medición base caja, es decir, el gasto devengado y pagado, durante los primeros 11 meses del año el Gobierno lleva erogados 82,7 billones de pesos en gasto corriente. La cifra representa una baja real del 11 por ciento comparando el total de enero a noviembre de cada año.

Así, el Ejecutivo acumuló en el mismo período 11,7 billones pesos de superávit primario, sin tomar en cuenta el pago de intereses. En diciembre, como anticipó el propio ministro de Economía, Luis Caputo, el déficit financiero fue equivalente a 0,3 puntos del PBI.