El coordinador de Epidemiología de la Municipalidad, Matías Lahitte, informó ayer sobre la situación epidemiológica de dengue en Rosario. En lo que va de la temporada 2024/2025, se diagnosticaron 9 casos, de los cuales 8 son autóctonos, es decir sin antecedentes de viaje, y uno solo importado.

“Todos los pacientes evolucionaron favorablemente, fueron casos leves y ninguno tuvo que ser internado”, manifestó el funcionario respecto al estado de salud de las personas diagnosticadas con la enfermedad durante este temporada.

Además, reiteró la importancia de realizar la consulta médica temprana ante la aparición de síntomas compatibles con la dolencia, especialmente de los que son considerados signos de alarma: fiebre persistente durante varios días, dolor abdominal intenso, vómitos y sangrado.

En ese sentido, Lahitte destacó el trabajo preventivo que viene realizando el municipio. “Durante la temporada de invierno empezamos con las acciones preventivas, se colocaron ovitrampas, se registraron los lugares con mayor población de mosquitos en la ciudad, se sostuvo la estrategia de descacharrado al igual que distintas acciones barriales, entre otras”, enumeró, y agregó: “Pero lo que notamos entre los vecinos y vecinas es una mayor concientización de la enfermedad”.

En este marco, el municipio insiste en la importancia de las tareas de prevención para evitar la reproducción del mosquito transmisor de la enfermedad, por este motivo, es fundamental la eliminación de los objetos que puedan acumular agua.

En el interior de casa:

  • Mantener limpios y ordenados los espacios.
  • Mantener los ambientes libres de mosquitos utilizando espirales, pastillas o insecticidas o sahumar con plantas secas encendidas (como romero, eucalipto, alcanfor o menta).
  • Colocar telas metálicas o tejidos mosquiteros en puertas y ventanas.
  • Utilizar repelentes comerciales (de extra duración dado la menor frecuencia en que debe aplicarse) o bio repelentes
  • Revisar elementos que acumulen agua como por ejemplo floreros. En este caso, se puede cambiar el agua por arena húmeda.
  • Reutilizar, reciclar o reducir residuos sólidos que puedan convertirse en criaderos de mosquitos (por ejemplo: envases de alimentos y bebidas no retornables, etc.)
  • También se recomienda mantener el césped cortado y las plantas podadas, usar repelente corporal y espirales así como también el uso de vestimenta clara al momento de realizar actividades recreativas o deportivas en espacios verdes.