La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, celebró los primeros 100 días de su mandato este domingo, en un acto realizado en el Zócalo de Ciudad de México. Durante el mismo, la mandataria se dijo "convencida" que la relación con Estados Unidos será "buena y de respeto" y que "prevalecerá el diálogo" con el presidente entrante, Donald Trump, a una semana de la investidura del republicano.

Tres meses después de su asunción, la presidenta goza de una popularidad superior a la de su predecesor y mentor, Andrés Manuel López Obrador, con el 80% de los mexicanos mostrándose a favor de su trabajo como presidenta, según una encuesta reciente de la firma Enkoll.

Durante su discurso, Sheinbaum remarcó que su Gobierno es el "segundo piso" de la transformación iniciada por el expresidente. "Nos critican y cuestionan por qué hay continuidad en el proyecto. Siempre lo dijimos, por eso luchamos estos años y para eso nos eligieron, para dar continuidad a la transformación de la vida pública de México (...) no vamos a regresar al régimen de corrupción", sentenció la mandataria, que delineó durante su exposición los principales desafíos de su gestión: la violencia del narcotráfico, las reformas constitucionales y su relación con Estados Unidos.

Águilas distintas

El evento dio comienzo con la entonación del "Himno Migrante", una canción que rinde tributo a los mexicanos en Estados Unidos, que fue acompañado de un homenaje a las comunidades indígenas de México. "Quiero referirme a un tema relevante en estos momentos, que es la relación entre México y Estados Unidos", abrió la presidenta, quien destacó que, aún con los momentos dolorosos, han habido múltiples instancias de colaboración entre ambos países.

Así, Sheinbaum se refirió a la relación entre mandatarios de ambos países, como Benito Juárez, quien fue ayudado por Abraham Lincoln en su lucha contra los invasores franceses, o el respeto entre Franklin D. Roosevelt y Lázaro Cadenas. A su vez, también subrayó la "relación de respeto y colaboración" del primer período de Trump con su predecesor, en particular con la firma del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).

"Por eso estoy convencida que la relación entre México y Estados Unidos será buena y de respeto y prevalecerá el diálogo; nuestra visión es el humanismo mexicano: la fraternidad entre los pueblos y las naciones", consideró la presidenta, antes de añadir: "Eso sí, siempre tendremos la frente en alto. México es un país libre, independiente y soberano y, como lo he dicho, nos coordinamos, colaboramos, pero nunca nos subordinamos".

Frente a los primeros embates verbales de Trump quien, además de amenazar con una deportación masiva de migrantes luego de asumir el poder, indicó que el Golfo de México debía cambiar su nombre a "Golfo de América", la líder progresista respondió con una mezcla de diplomacia y firmeza, asegurando que estas declaraciones se deben a la "manera de comunicar" del republicano, y que la relación entre ambos países es mutuamente beneficiosa.

En vez de cargar contra Trump, la mandataria destacó el efecto positivo del envío de cerca de 65.000 millones de dólares de mexicanos residentes en el país vecino para sus familias durante el último año. Para la presidenta, sus compatriotas en Estados Unidos "contribuyen a la economía de México, pero que se escuche bien y que se escuche fuerte, contribuyen más con la economía de los Estados Unidos", según explicó este domingo.

"Los mexicanos trabajan como ninguno en Estados Unidos, son trabajadores extraordinarios del campo, de la construcción, de los servicios, son grandes científicos en las universidades (...) nunca los olvidamos, todo lo contrario lo reconocemos y los defendemos", finalizó Sheinbaum.

El pasado miércoles, Sheinbaum había valorado que en México "gobierna el pueblo", frente a las acusaciones de Trump que declaró que el país está "esencialmente gobernado por los carteles" y que "está realmente en problemas". En las últimas semanas, el país anunció dos incautaciones de fentanilo, la droga sintética que provoca decenas de miles de sobredosis en Estados Unidos.

"La presidenta está a la altura de las expectativas por lo que se refiere a las amenazas de Trump. No se somete y es una buena cosa", comentó Reynol Chamec Cruz, diputado mexicano por el distrito de Teapa.

Violencia narco

Los primeros meses del mandato de Sheinbaum también estuvieron marcados por violentos enfrentamientos entre facciones del cártel de Sinaloa, que dejaron 651 muertos y 513 desaparecidos entre septiembre y diciembre del año pasado, según un informe oficial del diario citado por el diario mexicano La Jornada.

La mandataria heredó la pugna interna del Cártel del norte del país, que se intensificó significativamente en 2024, tras la captura en Estados Unidos de los capos Ismael 'El Mayo' Zambada y Joaquín Guzmán López, hijo del Chapo Guzmán, en julio.

Sheinbaum, sin embargo, eligió la celebración para reportar la disminución de los homicidios dolosos en un 16% entre septiembre y diciembre, una cifra que consideró positiva frente al total de 27.794 homicidios dolosos en los primeros nueve meses de 2024. La gobernante valoró que la mejoría se debe a su estrategia de seguridad de cuatro ejes: atención a las causas, consolidación de la Guardia Nacional, inteligencia y coordinación. "La estrategia de seguridad va a funcionar porque hay humanismo, dedicación y honestidad", apuntó.

El viernes anterior, la presidenta mexicana lanzó el programa "Sí al desarme, sí a la paz", mediante el cual el Gobierno canjeará las armas de la ciudadanía por dinero en efectivo e intercambiará juguetes bélicos de los niños por otros que no aludan a la violencia.

Reformismo

Desde que Sheinbaum asumió la presidencia, el Congreso bicameral mexicano aprobó más de 10 reformas constitucionales, facilitadas por la supermayoría que el oficialismo obtuvo tras las elecciones generales de junio de 2024. A partir de las mismas, el gobernante partido Morena logró fortalecer el control estatal sobre el sector eléctrico, ampliar el reconocimiento a pueblos indígenas y la promoción de la reforma judicial promulgada por López Obrador, que establece la elección popular de jueces y magistrados.

En la celebración, la mandataria destacó que la aprobación de estas reformas durante el inicio de su mandato es una muestra de un futuro mejor para los mexicanos. "Que no haya dudas, el Poder Judicial será autónomo", afirmó Sheinbaum en defensa de la reforma judicial, una entre las diez celebradas por la mandataria este domingo.

También resaltó la iniciativa, enviada por ella misma al Congreso, que dio estatuto constitucional a la obligación estatal de crear fiscalías especializadas en delitos contra la mujer y la prohibición de la brecha salarial por cuestiones de género, además de las que permitieron la desaparición de órganos autónomos al interior del estado, y la recuperación de las empresas estatales Petróleos Mexicanos y la Comisión Federal de Electricidad a la propiedad nacional.

Por último, la jefa de Estado informó que ya se iniciaron los trabajos para la promoción del desarrollo de industrias de primera línea, como la Inteligencia Artificial, el diseño de semiconductores, la extracción de litio y la fabricación de autos eléctricos.