El Comité de Emergencia Climática de la provincia de Salta informó que lleva adelante un monitoreo constante de los niveles de la cuenca del río Pilcomayo, que en la semana pasada desbordó su cauce por las lluvias en la zona y en la alta cuenca, en el Estado Plurinacional de Bolivia.
El secretario de Recursos Hídricos de Salta, Mauricio Romero Leal, destacó que el impacto del aporte de agua, y los escurrimientos en la cuenca salteña son habituales para esta época.
“Tuvimos unas inclemencias en estas últimas semanas producto de los aportes de las crecidas en la alta cuenca en Bolivia” que impactan en el territorio salteño, dijo el funcionario. Y adelantó que también esta semana el agua avanzará más allá del cauce del río.
Leal hizo hincapié en que estos desbordes son habituales para esta época, y son necesarios también para mantener el ecosistema en esa zona. “Es importante conocer esto y naturalizarlo ya que es necesario que el río escurra y pueda llenar aguadas y llegar al monte chaqueño", explicó.
Dentro de este comportamiento habitual, se hace necesario evitar que se inunden las comunidades indígenas que habitan este amplio territorio originario. El funcionario dijo que este cuidado "está dentro del plan de trabajo que tiene el gobierno de la provincia" y en ese marco están "en permanente contacto y articulación con el Comité de Emergencia que encabeza (el ministro de Desarrollo Social) Mario Mimessi”.
El funcionario de Recursos Hídricos destacó que durante los últimos cinco años se trabaja en todo un sistema de defensa de anillos y terraplenes de contención para la protección de las comunidades.
La Secretaría a su cargo viene trabajando “con un sistema de defensas de los anillos terraplenes de contención para la protección de las comunidades”.
La cuenca del río Pilcomayo es compartida entre Argentina, Bolivia y Paraguay. Según señala el portal Pilcomayo.net, "integrando la gran Cuenca del Plata el área abarca una superficie de 290.000 km2 aproximadamente, con una población estimada de 1.500.000 de habitantes".
En su extensión el Pilcomayo recorre diferentes paisajes, habitats de más de 20 pueblos indígenas que desarrollan su vida en torno a esta cuenca.
Este curso de agua es considerado uno de los ríos con mayor cantidad de transporte de sedimentos en el mundo, con una tasa media anual de 125 millones de toneladas. "Esta particularidad constituye el rasgo natural por excelencia de la región, recorriendo más de 1000 km desde los 5500 m de altura en sus nacientes en Bolivia hasta los 250 m en los alrededores de Misión La Paz en territorio argentino", señala el portal.
En la cuenca alta el Pilcomayo es un río de montaña, en la localidad boliviana de Villa Montes entra en la planicie chaqueña y se extiende por unos mil kilómetros hasta el río Paraguay (de los cuales 835 kilómetros son frontera entre Argentina y Paraguay). En este tramo se convierte en un río de llanura.
Otra particularidad del Pilcomayo es que en su curso llano (en el Chaco de Paraguay y Argentina) el río se pierde, es decir no desemboca directamente en el río Paraguay. Esto ocurre por la sedimentación o atarquinamiento, que se aceleró durante el siglo XX.
En llanura el río Pilcomayo "constituye uno de los mejores ejemplos de mega-abanico fluvial, frecuentes en las faldas orientales de los Andes en América del Sur. Es también el mayor de ellos" y "el único del mundo que presenta el fenómeno de extinción del cauce por atarquinamiento", detalla el portal. Lo particular es que "en el lugar en que el río desaparece todavía fluye un caudal notable que se extiende formando bañados". Es lo que ocurre en el Chaco salteño, en la zona de Santa Victoria Este.