Migrantes disidentes. Se les ve en las marchas y concentraciones con una colorida pancarta hecha a base de manta, que lleva la inscripción: “Sin la migrantada no estamos todes”. Es un grupo pequeño, pero potente, conformado por personas originarias de Chile, Colombia, Brasil, Paraguay y otros países del mundo. Son parte de El Bloque de Trabajadores y Trabajadoras Migrantes, una organización que, en 2017, aglomeró las luchas de diferentes colectividades ante las restricciones migratorias y los discursos contra la población migrante en Argentina, por parte del gobierno del expresidente Mauricio Macri.

“Vimos necesario dar una respuesta a lo que comenzaba a generarse. Fue un momento en el que reforzaron la estigmatización de la migración por un tema de seguridad pública. Decían que veníamos a robar derechos que son amplios para todas las personas", dice Irving Moncada, colombiane y une de les fundadores de El Bloque.


Ahora, la Argentina gobernada por la ultraderecha bajo la presidencia de Javier Milei les convoca para seguir dando batalla en un contexto que atraviesa sus vidas: les migrantes se vuelven a enfrentar a la estigmatización y la diversidad sexual se ha convertido en un “chivo expiatorio” del gobierno. Ser migrante y LGBTIQA+ significa una doble vulnerabilidad mientras proliferan los discursos de odio y el país enfrenta retrocesos en derechos humanos.

La Libertad Avanza, que amenaza con derogar el decreto para la obtención de DNI no binarios y que despidió al menos a 900 personas contratadas en el Estado con la Ley del Cupo Laboral Travesti Trans, aprobada en 2021, ya planteó a inicios de diciembre enviar al Congreso un proyecto para modificar la Ley de Migraciones. Según el gobierno, con esta reforma pretenden que la educación y la salud para les migrantes no residentes en Argentina sean aranceladas. Sin embargo, les extranjeres que estudian en las universidades públicas son residentes, pues para entrar a las casas de estudio necesitan tener un DNI o tener un proceso migratorio iniciado para acceder a una residencia temporaria.

Construir una vida

“Desde distintas latitudes, contextos y territorios, las maricas, tortas, travos, no binaries, trans, travestis, cuir, bisex, asexuales, putxs, venimos a esta ciudad puerto a construir la vida que queremos”. Así se presenta el bloque de migrantes disidentes en redes sociales, en un posteo que parece un manifiesto, publicado posterior a la Marcha del Orgullo en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la primera marcha en el gobierno de Milei. Allí, al menos 20 migrantes que partieron desde la sede de El Bloque, en el barrio de San Telmo, hasta Plaza de Mayo realizaron intervenciones artísticas, como plasmar en diferentes espacios públicos una necesidad colectiva en un país que históricamente ha tenido una flexible política migratoria, pero cuyo acceso cada vez se complica más: el “DNI para todes”.


Bellota de Júpiter Cabrera marchó con el grupo. Elle es une artiste plásticx-visual chilene no binarie que lleva 11 años viviendo en Buenos Aires. Se unió a El Bloque de Trabajadores y Trabajadoras Migrantes a mediados de 2024, después de haber asistido a diferentes actividades y encontrarse con otres migrantes que también forman parte de la población LGBTIQA+. Militar en la organización le ha permitido sensibilizarse más sobre la diversidad de vivencias que enfrentan les migrantes originarios de otras regiones latinoamericanas o de otros continentes, ya que algunes, dice, tienen mayores dificultades para tramitar un DNI. Y, sin un documento, se les complica acceder a un trabajo o rentar un lugar para vivir.

“Esto es una resistencia constante, del día a día. Tal vez no vamos a parar una calle completa, pero es importante que haya presencia para ayudar y hacer comunidad, porque es una respuesta a lo que está pasando en Argentina. Está cambiando la legislación migratoria y gracias a estos lugares hay gente que está pudiendo solucionar cosas importantes como tener un documento”, cuenta Cabrera, quien a fines de diciembre, a través de la asesoría brindada por El Bloque, pudo acceder a su DNI no binario. En el proceso de obtención de su documento, Cabrera supo que el decreto que autoriza la entrega de DNI para personas no binarias también aplica para lxs migrantes, aunque elles no hayan hecho legalmente el cambio de identidad en sus países de origen, en el caso que estos reconozcan a las personas no binarias.


A diferencia de Argentina, que desde 2021 tiene un decreto vigente para el cambio de la identidad no binaria en el DNI, las personas no binarias en Chile deben emprender una batalla contra el sistema judicial para obtener su documento. Y es que, pese a la agenda conservadora de La Libertad Avanza, Argentina sigue siendo un referente en América Latina por la aprobación de leyes y políticas públicas a favor de las personas LGBTIQA+ nacionales o extranjeras

Un trabajo interseccional

El Bloque de Trabajadores y Trabajadoras Migrantes es dinámico. Comenzó con unas 30 personas y todavía quedan 10 de sus fundadorxs, lxs demás volvieron a sus países o militan actualmente en otras organizaciones, según Bryan Castillo, un colombiano que se integró a la organización en 2018 por medio de un proyecto de enseñanza de español para senegaleses.

Desde sus inicios, El Bloque ha tenido un trabajo territorial que ha unificado diferentes luchas. Su estandarte no sólo ha sido la militancia por los derechos de las personas migrantes en Argentina. En la pandemia del COVID-19, ante las restricciones de movilidad, el proyecto de enseñanza de español se convirtió en La Tiendita Migrante, un emprendimiento que existe a la fecha, donde lxs comerciantes senegaleses comenzaron a publicitar y vender sus productos por redes sociales. En su sede, además realizan talleres que van desde el arte hasta VIH; y tres veces por semanas realizan asesorías migratorias gratuitas.

"No dejamos sueltas luchas que hemos dado anteriormente, que tratamos de reinvindicarlas dentro de la misma organización", señala Castillo. Parte de esta dinámica fue el surgimiento de la migrantada disidente, que si bien cuenta con personas que son referentes dentro de El Bloque, es un espacio al que se puede integrar toda persona LGBTIQA+.

En medio de una avanzada ultraderecha y la nueva institucionalización de la xenofobia, en 2024, la población migrante en Argentina quedó desprotegida, ya que con la eliminación del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI) no hay institución estatal que atienda las denuncias por discriminación. El INADI también fue sustituido por el Ministerio de Seguridad, a cargo de Patricia Bullrich, en la Comisión Nacional para los Refugiados.

El año pasado, la Federación Argentina LGBT+ recibió denuncias de migrantes LGBTIQA+ de Rusia que no habían podido acceder a su residencia precaria, el documento previo al DNI que es fundamental para tramitar el refugio internacional. Rusia es uno de los países más rígidos con leyes contra las personas de la diversidad sexual y a esto se suma que, desde hace tres años, enfrenta una guerra con Ucrania que ha provocado la migración forzada de miles de personas. Algunas de ellas buscan como refugio a Argentina.

Desde el bloque migrante y disidentes, el mensaje en este contexto de ultraderecha que pone en peligro sus vidas es contundente: “Este gobierno representa lo más atrasado, lo más conservador y lo más representativo de un modelo que muchos de la región venimos escapando, que es el neoliberalismo. En la calle vamos a decir: ‘No tenemos miedo, no nos silenciamos. Esta no es la ruta para seguir ni en Argentina ni en ningún país de América”, enfatiza Moncada.