"Hay menos gente, menos espectáculos, menos plata y menos espectadores", enumera a Página/12 Sebastián Blutrach, productor y presidente de la Asociación Argentina de Empresarios/as Teatrales y Musicales (AADET), al hacer un diagnóstico de cómo va la temporada en Mar del Plata y Carlos Paz, las dos plazas teatrales veraniegas más importantes del país. Cifras preliminares reflejan una importante caída en las entradas vendidas en las dos últimas semanas, en comparación con el mismo período de 2024: en Mar del Plata es del 23 por ciento y en Córdoba, del 18. En esta nota, los análisis de Carlos Rottemberg, Ezequiel Corbo y Florencia Peña.
Es temprano para conclusiones. Aunque enero se presenta complicado en Mar del Plata, diciembre de 2024 fue mejor que el anterior. Por eso, aclara Blutrach: "No hay que condenar la temporada. Todavía tiene mucho para dar". En el cálculo inciden varios factores, incluso metodológicos -por ejemplo, cómo caen las fechas y cuántas funciones entran cuando se establece el corte del registro, que se hace semana a semana-. No obstante, el productor intenta comprender el porqué de esta foto: "Durante todo el año ha habido crisis de consumo y el teatro se defendió bastante bien. No estuve en la costa pero imagino que hay un turismo con poca capacidad de ocio. Más allá de la estabilidad de precios, la recesión y la crisis de consumo aprietan. Por ahí los salarios pudieron recuperarse un poquito, pero lo que le queda a la gente para gastar es menos que antes. También influye la programación, si hay propuestas atractivas o poderosas", explica.
La salida de turistas argentinos a Brasil podría ser un factor en juego, aunque no sería así a juzgar por las cifras oficiales. El dato para Mar del Plata es que del 1° de enero al 12 llegaron a la ciudad 521.659 turistas, número que representa apenas 0,1 por ciento menos que el mismo período de 2024. En Carlos Paz habría un 81 por ciento de ocupación la semana pasada. La composición de los visitantes en cada zona es otro elemento a tener en cuenta. "La gente del centro del país para el norte viajó más a Brasil que la de Capital y Gran Buenos Aires", compara Rottemberg. Con nueve elencos distribuidos en sus salas marplatenses, el productor y empresario tiene una mirada optimista de la situación.
Mar del Plata
La temporada 2023/ 2024 había sido llamativamente buena para el sector. No fue magia. La venta de entradas había crecido un 33 por ciento con el impacto del modelo de "Precios Amigables", ideado por Rottemberg -al que se unieron sus colegas-: localidades con un precio por debajo de la inflación que se mantiene durante todo el verano. "El teatro fue la única actividad que creció en ventas en Mar del Plata", señala a este diario. El año pasado las entradas costaban hasta 12 mil pesos. Ahora, con la segunda edición de la iniciativa en marcha, el tope es de 28 mil. Según el Indec, la inflación fue, de octubre a octubre, del 193 por ciento. El aumento en las entradas, aunque suena alto, se ubica 60 puntos porcentuales por debajo de esa cifra.
Este año en La Feliz las funciones se redujeron un 19 por ciento. Hay menos espectáculos, lo que revela algo sobre el comportamiento de los empresarios -menor apuesta en el territorio- y, a su vez, hace que "no noten tanto la caída" en las ventas al distribuirse el público por las distintas propuestas, como dice Blutrach.
En diciembre, la temporada había despegado con mayor fuerza en entradas vendidas que en el mismo período de 2023. "Hasta Reyes se dio una situación inédita. Por el clima había desolación en los balnearios, las playas, las piletas; pero en el casco urbano se veían mejores unidades de venta que el año anterior. En este momento hay 34 grados: es imposible estar en la ciudad. Y ahora hay más gente. Me animaría a decir que se recuperó el faltante de principio de mes y eso se nota en los teatros", precisa Rottemberg, quien debió agregar funciones.
Para él, el cierre será con un balance de público muy similar en cantidad global a la temporada pasada, "logrando sortear una menor llegada de turistas, al menos en los primeros días del año" y con un "buen aterrizaje para marzo" garantizado por el fin de semana largo por Carnaval. Asegura, además, que con la reducción de funciones, el promedio de espectadores de lo que va de enero termina siendo el mismo que el del año pasado. "Será una temporada con varios elencos exitosos, que irán rotando en el orden de preferencias, evitando una polarización entre dos únicos primeros", suma. El verano pasado los focos eran los espectáculos de Martín Bossi y Fátima Florez. Ahora hay un "empate" entre Brujas, Mamma mía!, Tom, Dick & Harry y La Jenny. "Que varios equipos se distribuyan la preferencia del público es muy saludable", concluye el productor.
"Estamos arriba. Nos fue muy bien en diciembre y nos está yendo bien en enero. Somos el espectáculo que más espectadores metió hasta ahora", celebra Florencia Peña, que encabeza el elenco de Mamma mía!. "Pasó con Carlos Paz y vuelve a pasar. Soy feliz de acercar un musical de calidad a la gente. Es distinto a lo que se ve en la ciudad porque no llegan espectáculos tan grandes. La gente lo agradece mucho. Creo que tenemos que traer cosas de calidad y no tirarnos a chantas. Las cuestiones del país hacen que por ahí la temporada sea un poco más remada, que la gente no venga por tanto tiempo y en vez de cuatro, cinco cosas, elija y vea dos", dice la actriz, y destaca las promociones para acercar al público.
En concreto, para el mismo período, el año pasado se contabilizaban 53 mil espectadores y, este año, 41 mil. "La primera semana del mes había poca gente. Ya no hay vacaciones tan largas como antes y hay más escapada. Creo que el tiempo jugó una mala pasada. Quizá las reservas de donde la gente puede manotear cada vez son menores y ni los Precios Amigables puedan amortiguar la caída. Pero creo que la tendencia se irá licuando a medida que avance la temporada. Si no sucede la semana que viene y al 26 de enero no va a suceder", analiza Blutrach.
Carlos Paz
Menos formal en cuanto al manejo de cifras, la plaza cordobesa suele ser una incógnita. Varios espectáculos no son incluidos en el relevamiento de Aadet porque los empresarios a cargo de ellos no integran la asociación. Hace días que circulan versiones contrapuestas sobre lo que allí sucede. Sorprendió que un actor tan exitoso como Pedro Alfonso dijera que la temporada está "tardando en arrancar". Es aún más raro lo que pasa en VCP que en Mar del Plata. Con un incremento de funciones (18 por ciento) también se registra una caída (del mismo número). "Este es el negocio de los análisis. Si te va mal ponés mil excusas", se sincera Ezequiel Corbo.
"El tema no sólo está en la caída de espectadores sino también en la de la actividad turística, con mucha gente yendo a Chile y Brasil. Hoteleros y gastronómicos hablan de una caída del 28 y 30 por ciento de la actividad", cuenta el productor de Un viaje en el tiempo, obra en la que actúa Alfonso. "Si bien estamos primeros en recaudación por el aumento de la entrada, en espectadores estamos mucho más abajo que el año pasado (18 por ciento). Además, uno no puede mirar sólo su ombligo", agrega. Las localidades en Carlos Paz -donde se presentan obras como Oficial Gordillo, Epico, Fatima 100% y Sinvergüenzas- cuestan en promedio 25 mil pesos. A las numerosas promociones y descuentos se suman estrategias insólitas, como el reintegro del costo del peaje a partir de la compra de una entrada.