El Hospital Bonaparte, el único nacional especializado en salud mental, tuvo este jueves un cartel llamativo. Por primera vez en su historia, la guardia recibía a los pacientes con un mensaje desolador, luego de los despidos que puso en marcha el gobierno: "No hay médico de guardia".
Entrevistada por la 750, Nadia Jausken, jefa del área de Demanda Espontánea del Hospital Bonaparte, explicó que con los 200 despidos que comunicó el Gobierno el miércoles pasado el hospital quedó prácticamente fuera de servicio.
“Esto claramente es un vaciamiento, porque es la mitad de la planta del hospital. Y no se puede funcionar de ninguna manera. Es una manera distinta de cerrarlo. Porque de esta manera un hospital no puede funcionar”, denunció por La García.
Sin ir más lejos, contó con pena la historia del cartel en la guardia: “Solo había dos psicólogos y se podía hacer contenciones verbales, porque el médico de guardia había sido despedido ese día”.
Es decir, todas aquellas personas que llegaban el centro de salud con “un cuadro severo, como una descompensación de un cuadro psicótico”, no se podía tratar en ese centro de salud y quedaba a su deriva.
Una deriva que en el universo de la salud mental no cuenta con muchas más herramientas, ya que, cabe recordar, el Bonaparte es el único hospital nacional especializado en salud mental.
Y todo esto en un contexto particular: “Pospandemia el número de personas que comenzó a consultar es exponencial. Y eso se mantuvo. Porque siempre que hay crisis socioeconómicas la gente la empieza a pasar mal”.
“Es difícil contrarrestar el relato de que hay pocos pacientes. Me hubiese gustado que vengan al hospital. Que es el único que funciona de 8 a 20 por fuera de una guardia”, contrapuso Jausken.
Y añadió: “Los argumentos son ciertas malversaciones de fondo, números que inventan. Estamos acostumbrados a la exageración en los números y a que inventen cifras. El relato se va armando y es muy difícil desarmarlo”.