La inflación de la provincia de Santa Fe que mensualmente mide del Instituto Provincial de Estadística y Censos (Ipec) fue del 2,4% en diciembre –apenas por debajo de la nacional que arrojó 2,7%- y acumuló a lo largo de 2024 subas del nivel general de precios de 114%, tres puntos menos que la medición que realiza el Indec, su par nacional. Sin embargo, entre los capítulos que incluye el relevamiento estadístico santafesinos, Vivienda y servicios básicos mostró una oscilación durante el año pasado que duplicó el promedio del índice, con una suba del 222,6%.

Dos componentes de ese rubro cooperaron con el fuerte sacudón al bolsillo: Alquileres –desregulados tras la derogación de la ley que les daba un marco normativo- tuvo una suba de 274%, mientras que “Servicios básicos y combustibles para la vivienda” –precios regulados- experimentó una oscilación positiva de 309%.

En el caso de Aguas Santafesinas, el gobierno provincial decidió otorgarle durante el año pasado un incremento de la tarifa del 450% para “equilibrar” las cuentas de la empresa. La EPE actualizó su cuadro tarifario en varias oportunidades durante 2024: en marzo fue del 83% (que llegó al 99% en el caso de los usuarios de pequeñas demandas); en junio –tras la quita de subsidios nacionales- incrementó el precio final del servicio entre un 12 y un 65% según el tipo de usuario; en septiembre entre un 2 y un 3%. Desde enero de este año, la compañía obtuvo un incremento del 24,8% y a partir de junio se ajustará de acuerdo a la inflación medida por el Indec.

Alquileres y servicios son gastos fijos que las familias o las personas no pueden eludir ni modificar, atento a que no hay “segundas marcas” ni ofertas ni liquidaciones, aunque en el caso de la renta inmobiliaria existen oscilaciones de mercado en orden a la calidad de los inmuebles y su ubicación, entre otros factores.

Según el informe del Centro de Estudios Scalabrini Ortiz, el promedio del costo de renovación fue inferior al medido por el Ipec para el año pasado, teniendo en cuentas las categorías monoambiente, uno y dos dormitorios, “los aumentos interanuales fueron de 69,2%, 87,5% y 95% respectivamente”. Así, según el documento, la mediana de los precios de monoambientes es de $220.000 en Rosario, de $300.000 para un departamento de un ambiente y de $390.000 mensuales de renta para dos dormitorios.

Disparidades

De los nueve capítulos que componen el Índice de Precios al Consumidor (IPC) que mide el Ipec, cinco estuvieron por encima del nivel general de precios de 2024 que, como se dijo, fue de 114%.

De acuerdo al último informen, difundido ayer por el organismo y correspondiente a los datos de diciembre, la inflación fue superior al promedio en Vivienda (222% anual); Atención médica y gastos de salud (142%); Transporte y Comunicaciones (136%); Educación (131%) y Otros bienes y servicios (129% a lo largo de 2024).

Por debajo del nivel general de precios se ubicaron los capítulos Esparcimiento (103%); Alimentos y bebidas (97%); Indumentaria (80%); y Equipamiento y mantenimiento del hogar (68%), algo más de la mitad de la inflación promedio que alcanzó los 114 puntos en Santa Fe.

Diciembre

De acuerdo al informe del Ipec difundido ayer, la inflación en Santa Fe fue del 2,4% en diciembre último, tres décimas por debajo del índice nacional. El mayor incremento se registró en el capítulo Esparcimiento, que exhibió un aumento del orden del 4,5% en el último mes del año.

También Vivienda y servicios básicos se ubicó por encima del nivel general, al mostrar una oscilación del 4,1%, del mismo modo que Educación, que experimentó una suba en diciembre del 3,2%.

El capítulo Alimentos y bebidas también estuvo por encima del promedio de precios en la provincia, con un incremento del 2,9% de acuerdo al relevamiento del Ipec. En cambio, Otros bienes y servicios (2%); Atención médica y gastos para la salud (1,7%); Transporte y comunicaciones (1,5%) e Indumentaria (0,7%), experimentaron durante diciembre subas que se ubicaron por debajo del 2,4% general.

 

En Alimentos y bebidas los mayores aumentos se dieron en la lechuga (26%) y el asado (14,9%), mientras que en el otro extremo el tomate redondo (-36,4%) y la papa (-21,1%) fueron los que más bajaron sus precios.