Mauricio Macri estuvo buena parte de la semana pasada en un estado parecido a un jaque al rey. Acorralado entre las fichas de ajedrez de sus enemigos y las propias. Al ex presidente lo sitiaron entre levantamientos internos de sectores con peso del PRO ante un comunicado oficial del partido que rompía lanzas con Javier Milei. El animo levantisco dejó en claro que tiene una buena cantidad de sus masu plan sigue siendo acicatear una candidatura propia y buscar que, si realmente existe una negociación, sea en igualdad de condiciones