El incendio en el Parque Nacional Nahuel Huapi continúa activo y la estrategia es desviar el fuego de las viviendas y de hitos naturales y turísticos importantes. Se consumieron más de 5 mil hectáreas y se complejizó en distintos puntos por las condiciones climáticas. En la Cascada Los Alerces, en la zona de Los Manzanos se acercó a sólo 300 metros de las viviendas.

Este foco fue contenido gracias al trabajo de 23 brigadistas, dos helicópteros, un avión hidrante y un hidroavión Fire Boss del Servicio Nacional de Manejo del Fuego. Se hicieron líneas de penetración hacia el fuego y ataque directo con agua. Además, dos autobombas con siete bomberos voluntarios permanecerán en la zona para garantizar su seguridad hasta el jueves.

Dámaso Larraburu, intendente del Parque Nacional, había decidido este martes no evacuar la zona porque el viento parecía llevar el fuego hacia el lado contrario. También confirmó que se notaban grandes actividades en la región de Las Melisas y, sobre todo, en el cerro Colorado y en el cerro Bastión, donde se generan columnas de humo que hacen avanzar el fuego.

El cerro Bastión fue fuertemente afectado en el incendio de la temporada 2021/2022. Se generó entonces un terreno inestable con una gran peligrosidad de caída de árboles. Por esto, la labor de los brigadistas se ve restringida y sólo se monitorea la zona.

Este miércoles, luego de controlar el incendio cercano a las viviendas en Los Alerces, los brigadistas se enfocaron principalmente en el sector del Cerro Colorado, la Laguna Quetro y Las Melisas. “El fuego se encuentra en una zona inaccesible con vegetación densa y topografía accidentada que dificulta enormemente las tareas de extinción. El terreno de difícil acceso, sumado a las condiciones meteorológicas adversas, empeoró la situación, haciendo que las llamas avancen rápidamente y dificultando el control del fuego”, relató Ariel Amthauer, brigadista de la zona.

Además, Larraburu informó que el tránsito permanecerá restringido desde la zona de ingreso de Los Rápidos hasta el Circuito Cascada Los Alerces. Sólo podrán circular vehículos autorizados de instituciones oficiales y de los habitantes locales.

En la ladera noreste del Cerro Colorado, el incendio genera columnas y focos secundarios debido al fuerte viento, dificultando las labores de contención. Otra prioridad es evitar que el fuego alcance los lagos Martín y Steffen.

La idea es salvar lo posible

El Comité de Emergencia, coordinado por el Parque Nacional y la Dirección de Lucha Contra Incendios Forestales, informó que una brigada de 30 personas trabajó en el Arroyo las Melisas en una línea de defensa para evitar que el fuego que baja desde Cerro Colorado ingrese a la zona de la Cascada. La intención es proteger este ambiente natural de alto valor de conservación y turístico.

De todos modos, el incendio ya atacó a la biodiversidad nativa. En cuanto a los árboles, se están quemando cipreses, coihues y lengas. Amthauer contó que estos generan una alta carga de combustible, ya que “superan los 1,5 metros de diámetro y los 40 metros de altura y están siendo consumidos por las llamas, aumentando considerablemente la dificultad para extinguir el fuego”.

Los bosques andino-patagónicos constituyen una de las últimas reservas mundiales de bosques templados con poca alteración antrópica y valiosa biodiversidad, y son uno de los biomas argentinos mejor conservados. Pero con incendios tan pronunciados y prolongados, se pierden cada vez más.

Hernán Giardini, coordinador de la campaña de Bosques de Greenpeace, listó la pérdida de animales a Página/12. "Entre los mamíferos de los bosques andino-patagónicos sobresalen el huemul, el pudú, el huillín, el hurón menor, el zorrino patagónico y el monito del bosque. Los predadores mayores son el puma, el zorro colorado, el zorro gris patagónico y el gato huiña; y los roedores son abundantes y numerosos. Entre la vasta cantidad de aves se distinguen el cóndor, el águila mora, el cisne de cuello negro, el pájaro carpintero gigante y el picaflor rubí".

Desde el Servicio de Prevención y Lucha contra Incendios Forestales (SPLIF), están trabajando con los pobladores de Lago Roca y Hess en estrategias de prevención y en el armado de un plan de contingencia en caso de que el incendio originado en Los Manzanos se aproxime a la población. Además, instalaron un reservorio de agua para la protección de viviendas y se puso en funcionamiento un puesto comando de observación y comunicación para vigilar la evolución del incendio.

El Comité destacó la labor conjunta de diferentes actores, incluidos guardaparques, brigadistas de la Policía Federal Argentina (PFA) y el SPLIF de Río Negro, quienes trabajan en distintas áreas para contener el fuego. Las condiciones climáticas --la sequía, altas temperaturas y fuertes vientos-- y la falta de infraestructura, dificultan la tarea y hacen que el objetivo sea controlar el fuego y no extinguirloGiardini advirtió que, por estos factores, sólo el período de lluvias de abril detendrá el incendio. Por ahora, las medidas apuntan a la prevención y al control mientras se espera una mejora de las condiciones climáticas.

Informe: Natalia Rótolo.