El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, participó en el Foro Económico Mundial de Davos con una agenda de desregulación y rebajas fiscales, que anunció como "el mayor recorte de impuestos en la historia de Estados Unidos", con el fin de impulsar el crecimiento económico y atraer la producción de empresas al país, mientras que aquellas que produzcan fuera se enfrentarán a aranceles. También pidió a los países de la OTAN que eleven el gasto en Defensa hasta el cinco por ciento del PBi.

"Para impulsar aún más nuestra economía, nuestras mayorías en la Cámara de Representantes y el Senado van a aprobar el mayor recorte de impuestos en la historia de Estados Unidos", adelantó Trump por videoconferencia, añadiendo que incluirán recortes de impuestos para los trabajadores y las familias, y grandes recortes de impuestos para los productores y fabricantes nacionales.

En este sentido, el presidente de EE.UU señaló que su Administración está trabajando con los legisladores demócratas para conseguir una extensión de los recortes de impuestos implementados durante su primer mandato presidencial. "Mi mensaje a todas las empresas del mundo es muy simple. Vengan a fabricar sus productos en Estados Unidos y les aplicaremos unos de los impuestos más bajos de cualquier nación de la Tierra", indicó Trump, añadiendo que aquellas que prefieran no fabricar en el país tendrán que pagar un arancel.

De este modo, confía en que estos aranceles, de diferentes montos, dirijan cientos de miles de millones de dólares al Tesoro de EE.UU. para fortalecer la economía y pagar la deuda. Asimismo, el magnate anunció lo que presentó como la "mayor campaña de desregulación de la historia", lo que transformará al país en "el mejor lugar en la Tierra" para crear empleos, construir fábricas o hacer crecer una empresa.

"Europa, injusta"

Asimismo, Trump considera que la Unión Europea trata a EE.UU. de manera muy injusta, en referencia a los diferentes impuestos, como el IVA, así como las trabas al comercio de productos agrícolas estadounidenses o a los automóviles fabricados en el país. "Hacen que sea muy difícil traer productos a Europa, y sin embargo esperan vender, y venden sus productos en Estados Unidos", señaló Trump, alegando que su país mantiene un déficit de "cientos de miles de millones de dólares" con la UE, advirtiendo de que nadie está contento con ello y que va a hacer algo al respecto.

En este sentido, comentó que las aerolíneas se quejan de que en Europa se les cobra "tasas por todo" y la situación es peor incluso que en China, además de recordar casos judiciales contra Apple o Facebook. "Son empresas estadounidenses, te gusten o no, son empresas estadounidenses y no deberían estar haciendo eso, y eso es, en lo que a mí respecta, una forma de impuestos, así que tenemos algunas quejas muy grandes", remarcó.

Por otro lado, el republicano presumió de haber puesto fin al "increíblemente derrochador" Green New Deal al que se ha referido como "Green New Scam" (la Nueva Estafa Verde), incluyendo las regulaciones relacionadas con los vehículos eléctricos para dejar que la gente compre el auto que quiera, mientras que al declarar una emergencia energética nacional será posible "liberar el oro líquido bajo nuestros pies y allanar el camino para aprobaciones rápidas de nueva infraestructura energética".

"Estados Unidos tiene la mayor cantidad de petróleo y gas de cualquier país del mundo, y lo vamos a utilizar", prometió, con la idea de que esto reducirá el costo de bienes y servicios, además de convertir a Estados Unidos en una superpotencia manufacturera y la capital mundial de la inteligencia artificial y la criptografía.

La guerra en Ucrania

Además de las decisiones sobre energía a nivel nacional, Trump dijo que tiene intención de pedir a Arabia Saudita y a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) que reduzcan el precio del petróleo. "Tienen que reducirlo", afirmó, sorprendido de que el cartel no tomase una decisión en este sentido antes de las elecciones presidenciales de noviembre. "No demostraron mucho cariño al no hacerlo", señaló en tono jocoso.

Trump añadió que si el precio bajase, la guerra entre Rusia y Ucrania terminaría inmediatamente. "Ahora mismo el precio es lo suficientemente alto como para que esa guerra continúe. Hay que reducir el precio del petróleo para poner fin a esa guerra. Deberían haberlo hecho hace mucho tiempo. En realidad, son muy responsables, hasta cierto punto, de lo que está sucediendo", recalcó.

Gastos de la OTAN

En su discurso también mencionó que pedirá a los aliados de la OTAN que eleven su gasto en Defensa al cinco por ciento del PBI, una subida fortísima desde el objetivo actual del dos por ciento, que algunos países --entre ellos España e Italia-- todavía no cumplen. Se trata de una posición de extrema relevancia en el devenir de las relaciones entre EE.UU. y Europa y de la seguridad en el continente europeo.

Más temprano un alto representante de Estados Unidos en el Foro de Davos dijo que los países miembros de la OTAN deben pagar su "justa parte" en Defensa antes de plantearse una ampliación de la alianza. "No se le puede pedir al pueblo estadounidense que amplíe el paraguas de la OTAN, cuando los miembros actuales no están pagando su justa parte", declaró Richard Grenell, nombrado por el presidente Donald Trump como enviado presidencial para misiones especiales.

Grenell hizo este comentario por videoconferencia, con motivo de un desayuno organizado en el Foro de Davos, en los Alpes suizos. Justo antes de hablar él, el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, presente en Davos, afirmó que "la plena membresía es el desenlace más fácil" para Ucrania si alcanza una paz "sostenible" con Rusia.

En tono exigente, Grenell aprovechó para incidir en el pedido del presidente Trump para que los países de la OTAN gasten más en sus ejércitos. "Tenemos que garantizar que esos líderes están gastando la cantidad adecuada de dinero. Tenemos que poder evitar la guerra. Y eso pasa por que la OTAN represente una amenaza creíble", apuntó.