“Argentina no ofrece las condiciones necesarias para la pluralidad de voces por primera vez en la historia de la Organización Mundial del Comercio. Es insólito e inaudito. Esto puede ser la antesala para el G-20”, advirtió ayer el doctor en Derecho, Javier Echaide, al referirse a la decisión del Ministerio de Seguridad de revocar 63 acreditaciones a representantes de la sociedad civil acreditadas por la OMC para participar de una conferencia ministerial en Buenos Aires.
El miércoles pasado una veintena de organizaciones no gubernamentales recibieron un correo electrónico de la OMC donde les comunicaba que “por razones no especificadas la seguridad de la Argentina decidió denegar su acreditación, por eso desaconsejamos que viajen para evitar ser regresados al ingresar en el país”. Como informó ayer este diario la decisión estuvo a cargo del Ministerio de Seguridad y la Agencia Federal de Inteligencia. “En los casos que no se aceptó es porque tenían vocación más disruptiva que constructiva”, indicaron desde el Gobierno. Entre quienes fueron rechazados figuran miembros de organizaciones de Finlandia, Holanda, Inglaterra, Chile, Brasil, Uruguay, Indonesia y Suiza.
“No hay tolerancia a voces disonantes al foro. Ni siquiera hay espacio para un taller o diálogo con los ministros de Comercio que vienen al país a participar”, lamentó el abogado y activista. “El problema no es la reunión sino la agenda que plantea la Argentina. El problema es Macri no la OMC. El foro debería utilizarse para plantear temas vinculados a las posibilidades para el desarrollo”, expresó el ex secretario de Relaciones Económicas Internacionales, Carlos Bianco.
