La Policía Federal desmanteló a un clan familiar acusado de producir y comerciar material filmográfico de abuso sexual contra niños, niñas y adolescentes en la localidad bonaerense de Pilar.
El padre y los dos hijos fueron detenidos en su casa, ubicada en la calle Neuquén al 300, como producto de una investigación que descubrió las actividades ilícitas.
La investigación comenzó cuando la Unidad Fiscal Especializada en Delitos Conexos a la Trata de Personas y Pornografía Infantil de San Isidro, liderada por Gonzalo Acosta y con apoyo de la secretaria Lorena Argüello, detectó una cuenta en la red social Telegram donde se distribuían archivos con contenido de explotación sexual de niños, niñas y adolescentes. En torno a este hallazgo los oficiales de la División Delitos Cibernéticos contra la Niñez y Adolescencia profundizó en sus búsquedas.
Mediante un importante análisis digital los investigadores dieron con la ubicación del domicilio donde se realizaban las conexiones y se compartían los materiales ilícitos. Así, el juez Walter Saettone emitió la orden de allanamiento.
El resultado de esa intervención fueron los tres arrestos a los integrantes de la familia (todos argentinos y mayores de edad) junto con el secuestro de tres teléfonos celulares, una CPU y un pendrive que tendrían relación con los delitos cibernéticos contra niños, niñas y adolescentes.
Los detenidos son acusados por el delito de "producción y comercialización de representación de menores de 18 años dedicados a actividades sexuales". Tanto el padre como sus dos hijos se encuentran a disposición del magistrado interventor. Sin embargo, la investigación no terminó ya que aún resta dilucidar si hay más personas vinculadas en esta red.
