Javier Frana llegó a la capitanía de la Copa Davis con dos mensajes claros: promover la unidad, en un ecosistema en el que prevalecieron las internas, y esquivar el dramatismo, un sentimiento que suele apoderarse del presente emocional de los jugadores que representan a su país.
De elocuente perfil pacificador, hasta en su manera de moldear las palabras, el flamante conductor sabe que tendrá, en términos deportivos, una parada muy difícil para su estreno en la silla, con el formato mano a mano y al mejor de cinco puntos, cuatro singles y el doble: Noruega, de visitante, del 30 al 31 de enero, en el Fjellhamar Arena -2.000 espectadores- sobre superficie rápida bajo techo, en la ciudad de Fjellhamar, situada en las afueras de Oslo.
Los locales contarán con el número seis mundial Casper Ruud y Argentina llegará sin sus mejores armas, sobre todo luego de la sensible baja de Francisco Cerúndolo, lesionado en el talón de aquiles. El equipo nacional, en caso de avanzar, se medirá ante Países Bajos, también fuera de casa, en una serie de octavos de final.
Con la filosofía personal a flor de piel, con un mensaje que desdramatiza el resultado negativo, Frana condujo el último entrenamiento en el Tenis Club Argentino y partirá este sábado rumbo a Noruega para su primera experiencia en la nueva etapa de su vida: "Esto es un proceso: no está atado al resultado. Obviamente queremos ganar y vamos a estar en todos los detalles, pero lo importante es que todas las vivencias nos dejen un aprendizaje. El resultado no lo podemos manejar; no sabemos si Ruud va a estar inspirado o si va a jugar mal. Queremos ganar, no hay dudas, pero nadie va a morir".
Sin el número uno nacional Sebastián Báez desde un principio, el capitán perdió a su mejor carta días antes del viaje, pero sabe que son situaciones que debe resolver: "Lo de Fran (Cerúndolo) fue lamentable, sobre todo para él que moría por estar y que hizo todo lo posible. Pero es parte del juego. No puedo pretender que todo sea fácil". El reemplazante fue Facundo Díaz Acosta, 73° y campeón defensor del Argentina Open. El plantel también estará compuesto por Tomás Etcheverry (38°), Mariano Navone (47°) –otro debutante– y los doblistas Horacio Zeballos (4°, ex 1°), en su regreso estelar tras el conflicto con el ex capitán Guillermo Coria, y Andrés Molteni (19°). "Hay buen clima: somos tres debutantes, dos jugadores y yo", sonrió Frana.
Desde su asunción exhibió una mirada conciliadora en busca de la unidad y, por eso, encaró la resolución del conflicto con Zeballos, número uno del mundo durante 15 semanas en 2024 y marginado de los Juegos Olímpicos por Coria. "No hubo que convencer a nadie. Nadie me puso condicionamientos, jamás. Horacio tenía ganas, estaba ilusionado; cuando le pregunté y me junté con él para ver cómo estaba me dijo que quería tener una nueva experiencia", sostuvo el rafaelino de 58 años, ex doblista de calibre -medallista olímpico en Barcelona 1992 y 14° del mundo-.
De vínculo inherente con la Davis, certamen que jugó durante toda su carrera entre 1986 y 1997, Frana sabe que Argentina siempre tendrá un potencial de riesgo, incluso pese a las bajas: "Lo que tiene Argentina es esto: la capacidad de tener muchos jugadores. Uno te da por acá, el otro te da por allá. Si el de enfrente mira el equipo, lo que hoy somos, no creo que vean que estamos diezmados, sino que nos ven como un equipo durísimo. Nos hacemos fuertes".
Más allá de que el capitán habría pedido una comitiva corta para el viaje de este sábado, se sabe que habrá dos llamativas ausencias: como en algunos compromisos previos de visitante, no estarán ni Agustín Calleri, el presidente de la Asociación Argentina de Tenis (AAT), ni Mariano Zabaleta, el vicepresidente, dos puestos que serán reemplazados por el del tesorero Ignacio Uzquiza -ya viajó como jefe de delegación dos años atrás ante Finlandia y el del encargado de marketing Lucas Shedden. En pocas palabras: Argentina irá a Noruega sin integrantes de la primera cúpula dirigencial.
Además de las bajas de jugadores y dirigentes, el foco estará puesto en dos debutantes: Navone y Díaz Acosta, dos piezas de presente estable y de fructífera proyección. Frana tiene claro el valor agregado que pueden añadir en el plantel: De Mariano ya sabemos qué clase de jugador de tenis es y cuál fue el crecimiento que tuvo. Sigue en plena evolución en todas las superficies. Con Facu no descubro nada y tenemos un aporte más: es zurdo y, por lo menos en singles, nos puede dar la posibilidad de modificar algunas cosas. Hay que entender que para ambos es un sueño cumplido y no se puede transformar en una pesadilla cuando lo vivís, porque sería equivocado".
Qué tiene Noruega
Número seis del mundo (ex2°), dos veces finalista de Roland Garros y una en el US Open, Ruud es el mejor tenista de la historia de Noruega. El jugador de 26 años no estará solo, más allá de que los complementos no tendrían un peso propio aparente.
En la última serie de septiembre, por la primera ronda del Grupo I, Noruega superó 3-1 a Portugal y, además de Ruud, jugó un número uno mundial que también estará contra Argentina: Nicolai Budkov Kjaer, de 18 años y actual 506° de ATP, pero líder del ranking internacional de la ITF en juniors durante 2024 y campeón de Wimbledon en la categoría sub 18.
En la nómina de los locales además fueron designados Viktor Durasovic (289°), Leyton Rivera (1299° en singles y 1562 en dobles) y Lukas Hellum Lilleengen (500° en dobles).