El presidente Javier Milei aseguró que este año pondrá fin “de una vez por todas” al control de cambios. “Un mamarracho que nunca debería haber existido”, dijo en su discurso luego de recibir otro de sus llamativos reconocimientos internacionales -en este caso, el Premio Röpke del Liberal Institut, en Suiza-. Sin embargo, hace apenas unos días tanto el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo como el propio mandatario habían puesto paños fríos a las expectativas y condicionaron el fin del cepo a distintos factores, en especial la entrada de dólares al país.

“La convergencia del tipo de cambio paralelo con el tipo de cambio oficial nos acerca cada día un poco más a la salida definitiva del cepo cambiario, un mamarracho que nunca debería haber existido y que este año se termina de una vez por todas", dijo Milei en Suiza.

Para hacerlo, continuó el Presidente, “estamos trabajando en diferentes alternativas para darle una solución definitiva a los problemas de los stocks del Banco Central”. “En ese sentido, han sido muy positivas las reuniones con el FMI que hemos tenido en Washington”, agregó.

El jueves, Caputo -que volvió de la gira presidencial para reunirse con la misión del Fondo Monetario en Argentina- expuso en sus redes sociales que el fin del cepo “no es un tema de fechas”.

"Estimados, de las restricciones cambiarias se va a salir cuando las 3 condiciones que nos hemos planteado estén dadas, como siempre hemos dicho con el presidente. No es un tema de fechas", escribió el jefe del Palacio de Hacienda en su cuenta de X.

De acuerdo a los dichos de Caputo, las tres condiciones para que se abra el cepo son las siguientes:

  • Que la inflación caiga por debajo del 2,5% para activar la reducción del crawling peg al 1%, lo cual sucederá desde el 1° de febrero.
  • Que la base monetaria tradicional (cantidad de dinero circulante) coincida con la base monetaria amplia (que suma las letras emitidas por la autoridad monetaria). Según analistas la base monetaria se mantiene constante desde hace varios meses.
  • Que se solucione el stock de deuda del Banco Central, lo cual podría concretarse con los dólares que aporte el nuevo acuerdo con el FMI.

Caputo tuvo que salir a dar explicaciones debido a que Milei, en una entrevista a la agencia Bloomberg que había dado el miércoles, había asegurado que el cepo es una herramienta "aberrante" que eliminará en cuanto sea posible.

Al igual que el titular de Hacienda, Milei señaló tres condiciones que están referidas a la inflación, a la base monetaria "ampliada" y, en tercer lugar, al financiamiento que consiga.

"Una condición es que la inflación inducida converja con la inflación observada. Ahora pasamos a un crawling peg (tasa de devaluación mensual del dólar oficial) del uno por ciento. Si en tres meses se va dando que la inflación cae al 1,5 por ciento, quiere decir que se estaría convergiendo en materia inflacionaria y tendríamos que ya sacar el crawling peg". Si se tomara literalmente los dichos del Presidente, podría significar que el dólar oficial quedaría a un precio fijo desde ese momento (tasa de devaluación cero), para inducir a la inflación a que converja a cero.

"Otra cosa que nosotros pusimos como condición es que la base monetaria observada coincida con la base monetaria amplia, de modo tal que cuando se abra el cepo no haya una corrida. Y el tercer elemento, tiene que ver con la posibilidad de conseguir financiamiento", completó Milei ante su entrevistador.

Si no hubiera financiamiento, aclaró, "nosotros vamos a salir igual del cepo en algún momento, cuando logremos reconstruir el equilibrio de stocks en el Banco Central. La diferencia es que si nosotros conseguimos financiamiento, la salida es más rápida".