La Corte Suprema de los Estados Unidos rechazó la apelación que la República Argentina había interpuesto contra los embargos de activos presentados por bonistas extranjeros que siguen en default.

Se trata 310 millones de dólares que el país tiene en la Reserva Federal y que fueron reclamados como parte de una deuda en el marco de una causa ya resuelta.

Los abogados que representan a la Argentina intel máximo tribunal estadounidense resolvió a favor de los privados.