Entre 400 y 800 millones de personas en todo el mundo se verán afectadas por la automatización y tendrán que encontrar una nueva ocupación desde hoy hasta el 2030, según un informe realizado por la consultora McKinsey Global Institute. El impacto de las nuevas tecnologías en la vida de los trabajadores será sentido sobre todo en las economías más desarrolladas. De acuerdo con el informe, hasta un tercio de la fuerza laboral en Estados Unidos y Alemania tendrá que aprender nuevas habilidades y encontrar otra ocupación. En Japón, el porcentaje de afectados podrá llegar casi a la mitad de los trabajadores. Los efectos del fenómeno calculados por la consultoría varían de acuerdo con la proyección que se tome en cuenta: si la automatización de las economías avanza a un ritmo intenso o gradual. Lo que no aclara la consultora es que la responsabilidad no es de la tecnología sino del uso social que se le da a la misma.