El 21 de enero, Agustín López Gagliasso de 20 años atropelló en Rosario a una familia cordobesa. Tania Gandolfi de 41 años y su hija Agustina García de 16 fallecieron a consecuencia de esto. Este lunes, el intendente rosarino publicó el video de las cámaras de seguridad con la frase "No fue un accidente, fue un crimen".

Gagliasso conducía a la velocidad permitida hasta que en el ingreso de un túnel aceleró y sobrepasó a otros autos, cambiando de carril con "maniobras temerarias", según lo calificó el intendente Pablo Javkin. 

"La cámara de video control de salida del túnel lo capta a más de 120 Km por hora, el doble de la velocidad permitida. Pocos metros más adelante atropellará a Tania y Agustina, quitándoles la vida", sentenció el funcionario rosarino en sus redes sociales.

Giovanna R. (20), quien era acompañante al momento del siniestro fatal, declaró los motivos por los que el conductor aceleró la velocidad: un motociclista sobrepasó al conductor antes de ingresar al túnel --como hizo con otros autos--, Gagliasso lo insultó y, enojado, aceleró para alcanzarlo.

Estaba cegado. Yo tenía miedo, pensé que me moría. Me agarré fuerte. No sentí el impacto. Salí sola del auto, me vi llena de sangre. Me dolía todo, al principio no podía caminar, tenía vidrios pegados en la cara. Pedí ayuda. Agustín siempre estuvo enfocado en seguir a la moto, estaba en la suya, no le importó nada, ni si yo me moría o si chocaba con otros autos. Un inconsciente”, manifestó la joven.

Gagliasso estuvo internado, pero este viernes quedó formalmente imputado por "homicidio simple con dolo eventual", que tiene una pena de entre 8 y 25 años de prisión. Las fiscales Mariana Prunotto y Valeria Piazza Iglesias le atribuyeron en la audiencia el haber mantenido un “altercado” con un motociclista en el túnel Arturo Illia, hacer maniobras de sobrepaso a otros vehículos y haber perdido el control del auto a más de 120 km/h.

Si bien la defensa del joven rosarino acepta la descripción de los hechos realizada en la audiencia de imputación, cuestiona la carátula puesta. El abogado Carlos Varela dijo a medios locales que se hizo "demagogia para quedar bien con el clamor popular".

Además, opinó que "la gente tiene la costumbre de reclamar penas severísimas, olvidándose que un accidente de tránsito le puede ocurrir a cualquiera". Así, su objetivo es reducir la pena a una máxima de 6 años, ya que argumenta que Gagliasso no actuó con "dolo eventual", es decir, con intención de matar.

"Imágenes concluyentes"

Frente a esto, Javkin pidió que no se cambie la carátula. "Quiero ser muy claro. No nos van a convencer con trampitas legales. Las imágenes son concluyentes. El conductor mató y no hay situación que justifique semejante accionar criminal. Es una persona que en un túnel urbano, con total determinación, al doble de la velocidad permitida y sin ninguna intención de freno, arruina la vida de una familia", sostuvo el intendente.

El lunes vecinos rosarinos organizaron una movilización en el lugar del hecho, donde se pintaron dos estrellas amarillas. "Por la familia García de Córdoba y porque podríamos haber sido nosotros, por favor tomen conciencia. No puede ser una historia que olvidemos en una semana", resaltaron al convocar. También hubo manifestaciones en Córdoba para pedir justicia.

Junto con las dos cordobesas, estaba Victoria --hija de 6 años de Gandolfi y de Diego García, el padre de las dos niñas. La hija menor tuvo que ingresar al hospital y recibió el alta, regresando a su provincia natal.

En la audiencia, el esposo y padre declaró frente a las fiscales y la jueza que, tras el siniestro, se acercó al joven conductor y le preguntó si vio lo que hizo. Gagliasso habría respondido: "Y... mirá cómo me quedó el auto". García asumió que se abalanzó hacia el joven y lo golpeó hasta que la Policía los separó.

"Tal como se lo prometimos a Diego, vamos a hacer todo lo necesario para que la justicia lo castigue con la pena máxima que prevé el código para un crimen como este. Si las hizo, que las pague", estalló el intendente de Unidos para Cambiar Santa Fe.

Informe: Natalia Rótolo.