Madonna, una de las artistas internacionales más comprometidas con las causas sociales y los movimientos a favor de los derechos y libertades de las diversidades sexuales en su vasta trayectoria artística, se plantó ante el presidente estadounidense Donald Trump, a raíz de las últimas medidas en el país norteamericano contra el colectivo LGBTIQ+.
Durante la toma de posesión, Trump aseguró que hará una "política oficial" de su Gobierno que solo se reconozcan dos identidades de género: "El masculino y el femenino". Además, anunció el veto a de las personas trans de las Fuerzas Armadas estadounidenses y la eliminación de programas federales de equidad, diversidad e inclusión, entre otras medidas.
A raíz de estos hechos, Madonna criticó abiertamente al dirigente republicano: "Es muy triste ver a nuestro nuevo gobierno desmantelando lentamente todas las libertades por las que hemos estado luchando y GANADO a lo largo de los años", escribió la diva en su cuenta de X.
En el mensaje agregó la bandera del orgullo LGTBI+, un corazón roto, y el mensaje "¡No abandonen la lucha!", además de una fotografía de su rostro.
Horas antes de ese mensaje, Trump cumplió con otra de sus promesas de campaña en este aspecto, y firmó una orden ejecutiva que prohíbe los procedimientos de reasignación de sexo en menores de 19 años, incluyendo tratamientos hormonales, bloqueadores de la pubertad y cirugías de cambio de género.
Madonna cantó no llores por mi, Argentina
Durante un recital en la ciudad catalana de Barcelona, la diva del pop subió al escenario con una bandera de las diversidades sexuales colgada en su espalda, y entonó la estrofa de "No llores por mí, Argentina" ("Don't Cry For Me, Argentina", en inglés), la famosa canción de 1976 compuesta por Andrew Lloyd Webber y Tim Rice, que la estrella internacional interpretó tiempo atrás para la película Evita.
Los seguidores de la cantante reflotaron el video de aquel momento en el marco de los ataques del presidente Javier Milei hacia la comunidad LGBTI+ de Argentina.