Rosmery Aramayo Torres, de 52 años, comerciante de Salvador Mazza, lleva ya dos semanas desaparecida, desde el viernes 17 de enero. Su marido, José Miranda permanece detenido, aunque dijo que la mujer se cayó al agua en la zona de Pozo La Yegua, se negó a colaborar con la búsqueda. El miércoles último hubo otra marcha reclamando mayor diligencia a las autoridades, después el fiscal Rafael Medina dio a conocer que amplió los lugares de búsqueda.
Pese a las jornadas intensas de rastrillajes, de la que participan distintas divisiones de la Policía, bomberos voluntarios, vecinos, y desde esta semana Defensa Civil, aún se desconoce el paradero de Rosmery. La causa se inició con una denuncia por extravío de persona, luego fue detenido el marido acusado por privación ilegítima de la libertad. La pareja tiene dos hijos en común y llevaba 22 años de matrimonio. Rosmery tiene un hijo y una hija de una relación anterior.
Desde que Miranda dijo que Aramayo se cayó al agua en la zona de Pozo La Yegua, la carátula cambió a femicidio. El Ministerio Público Fiscal informó este jueves que aunque el hombre expresó su voluntad de guiar la búsqueda, después no prestó colaboración.
Al grito de "queremos justicia", vecinos y familiares salieron a marchar por segunda vez el miércoles último en Salvador Mazza. El intendente Gustavo Subelza, junto a su gabinete y otras autoridades de la ciudad, acompañaron la manifestación y el reclamo de justicia por Rosmery.
"No hay nada y no sé cuándo va a haber noticias (...) ¿Por qué el (fiscal) Medina no habla, no obliga a su preso que hable, que diga, de una vez, para terminar con tanta agonía?", expresó entre lágrimas la madre de Rosmery, Alejandra Torres, en declaraciones al periodista Raúl Costes, de Infopocitos.
"Abogados de José Miranda, por favor, si tienen sentimientos, díganme dónde está mi hija", suplicó la madre. En la manifestación también se desplegaron carteles con ese pedido.
La movilización hizo una parada en el Centro Cultural, donde familiares de Rosmery expresaron su profundo dolor. La marcha continuó hasta el Destacamento Policial, donde exigieron mayor celeridad en la investigación.
El fiscal penal Rafael Medina informó ayer que el día antes se amplió el recorrido y la búsqueda de Rosmery en zonas aledañas al camino que conduce al Rancho El Ñato, ya en el extremo noreste de la provincia.
El operativo estuvo a cargo de efectivos de la Unidad de Investigación de Graves Atentados contra las Personas (GAP) de Tartagal, y la Unidad Especial de Investigaciones (UEI), a los que se le sumó personal de Defensa Civil de la provincia de Salta. Los equipos se desplazaron en móviles y motocicletas por distintos sectores con el objetivo de relevar el terreno y obtener nuevos indicios sobre el paradero de Aramayo Torres.
Por otro lado, el gobierno de la provincia de Salta informó también que el Ministerio de Seguridad y Justicia sumó al operativo de búsqueda a profesionales de Defensa Civil y precisó que en los operativos intervienen unidades especiales de la Policía como Lacustre, Canes, Investigaciones, Bomberos y policías del Distrito de Prevención 4.
El despliegue se inició en la denominada Curva de Juan, desde donde los equipos avanzaron por caminos de difícil acceso hasta llegar al puesto Don Tomás, del paraje 26 de jJunio, a 103 kilómetros de Tartagal. En este lugar, un testigo afirmó que vio pasar la camioneta de Miranda el 17 de enero, día en que desapareció Rosmery Aramayo. El fiscal Medina junto a su auxiliar se dirigieron a esta zona el martes último para tomarle declaración.
El Ministerio Público Fiscal de Salta detalló que se relevó la zona y se utilizó un dron con capacidad de cobertura de seis kilómetros a la redonda. La búsqueda también se extendió entre el puesto Echazú y el puesto Los Divertidos, con un barrido aéreo. Debido a la densa vegetación del área, con cebiles, palo santos, quebrachos y algarrobos, se inspeccionaron senderos y sectores de difícil acceso con vuelos de dron a distintas alturas y ángulos.
En la exploración se identificó un puesto sin moradores al que no se pudo acceder por caminos visibles, por lo que un equipo llegó a pie hasta el lugar y constató que la vivienda parecía deshabitada pero que es utilizada de forma esporádica.
Después se amplió el operativo hacia la finca Don Marzo, antes del paraje Los Divertidos, donde se realizaron nuevos barridos con dron. La búsqueda se suspendió a las 18.