La historia es siempre el lugar donde lo reprimido reaparece, sostiene Lacan, dejando claro que no existe historia alguna sin el retorno de lo reprimido. Que lo reprimido retorne no quiere decir que lo haga de un modo idéntico. Siempre habrá que saber leer las señales, las huellas, las marcas, que permitan captar el modo en que el retorno se cumple. Por ello el pasado verdadero viene del futuro. Pero ¿qué ocurre si en esta época se produjo una verdadera mutación y el olvido tiene una fuerza especial de destrucción y hace que la reproducción capitalista provoque verdaderos agujeros, que incluso sean más fuertes que la represión? 

El capitalismo,  según este criterio, cumpliría de un modo radical con la mentada profecía de Marx: "todo lo solido se desvanecerá en el aire y se hundirá en las aguas heladas del cálculo egoísta". En este punto se abre otra vertiente, existen fuerzas históricas que no las derrota el olvido sino que son rechazadas masivamente por los sujetos que habitan una época determinada. El abandono de la teoría y la praxis revolucionaria, por ejemplo. No se trata de nada reprimido, sino de una mutación material en las condiciones de reproducción del capitalismo las que han vuelto inoperante la voluntad transformadora que le daba vida al concepto de Revolución. 

Quiere decir entonces que vivimos la época del colapso de las prácticas y que los otrora intelectuales de la revolución actuarán ahora como profetas del Apocalipsis que anunciarán que la devastación ya está cumplida y que "solo un Dios puede salvarnos". La respuesta está en los sujetos, los dispositivos de poder buscarán incesantemente su reproducción, e intentarán establecer una dominación más potente, pero existe un deseo que sí se pierde la vida desaparece su sentido y lo que resta es la cobardía.

Ninguna mutación del capitalismo puede acabar con el deseo de oponerse a la dominación y preguntarse por el enigma de la igualdad y la justicia. Porque abandonar esto significaría solo existir como sujetos neuróticos que se pliegan a la pulsión de muerte.