Maradona, Cristina Kirchner, Alberto Férnandez y, sobre todo, los expedientes contra exfuncionarios peronistas serán los protagonistas del inicio del año judicial, en simultáneo con una parálisis absoluta en las causas que tengan que ver con el macrismo. Ese es el panorama que se pone en marcha este mismo lunes cuando se hace efectivo el reinicio del año judicial, después de la feria de enero. Ya el martes, Alberto Fernández tendrá que afrontar la indagatoria por los hechos de violencia de género contra Fabiola Yañez. El expresidente sostendrá que nunca existieron los golpes, que las fotos fueron trucadas, que por eso nunca se pudieron verificar --Yañez no entregó el celular-- y que su expareja sólo tuvo un pequeño moretón en el párpado, producto de un tratamiento. El 20 de febrero es la fecha tope para que Cristina presente su recurso para llegar a la Corte Suprema en la causa Vialidad. Hay un rumor de que el máximo tribunal resolvería el caso después de julio, pero con las internas actuales entre los supremos, parece difícil. Mucho antes, el 11 de marzo se iniciará el juicio por la muerte de Diego Armando Maradona, en el que todo el equipo médico está imputado por homicidio con dolo eventual. El proceso podría durar tres o cuatro meses, con tres audiencias por semana. En el interín habrá juicios por el Gas Natural Licuado (marzo), la novela de Andrea del Boca (marzo) y por plantas potabilizadoras (abril), siempre con exfuncionarios peronistas en los banquillos. Los expedientes que tienen como imputados a macristas -el Correo, los escandalosos blanqueos de la familia Macri, parques eólicos, peajes- no se mueven ni un milímetro.

Alberto por violencia de género

El expresidente prestará declaración indagatoria este martes por los delitos de lesiones leves y graves, agravadas por violencia de género y amenazas coactivas. El punto central son los golpes que Fabiola Yañez denunció a partir de varias fotos que se hicieron públicas.

Fernández volverá a recusar a juez Julián Ercolini este lunes, pero en otra causa, la de los seguros, y presentará chats de diálogos que mantuvo con el magistrado. El martes, el expresidente declarará y entregará un escrito, ambas cosas, aunque no contestará preguntas del fiscal Ramiro González, al que también cuestiona.

El ángulo central de la defensa es que los golpes no existieron y las fotos fueron retocadas. La base es que los peritos oficiales señalaron que no se pueden confirmar las imágenes porque Fabiola nunca entregó el celular: después de no cumplir con una cita con la fiscalía en Madrid, adujo que le robaron el aparato en el baño del Parque Retiro.

No obstante, la acusación más fuerte del fiscal González tiene que ver con el daño psicológico por la supuesta presión para que Fabiola se someta a un aborto. Fernández presentará la historia clínica de su expareja en el instituto Ineco, que conducía Facundo Manes, en el que constan un aborto anterior, un intento de suicidio y los problemas de adicción. O sea, que su argumento es que Fabiola venía con problemas anteriores, que él no produjo el daño psicológico. Habrá que ver si con esos elementos, el expresidente evita el procesamiento, que es la próxima decisión que deberá tomar Ercolini.

En paralelo, las tensiones sobre la causa parecen haber aflojado. Con la intervención de la justicia porteña, en las últimas semanas hubo una revinculación de Fernández con el hijo que tiene con Fabiola, Francisco. Hicieron varios encuentros vía zoom. 

Cristina por Vialidad

El 20 de febrero vence el plazo para presentar los recursos en la causa Vialidad, con el objetivo de que la Corte Suprema resuelva sobre la condena a seis años de prisión que confirmó la Casación Penal. La lógica es que el expediente siga el camino hacia el máximo tribunal. Como se sabe, los abogados de CFK, Carlos Alberto Beraldi y Ari Llernovoy, no sólo argumentan que en tres años de juicio no hubo un solo testigo que mencionara a Cristina, que dijera que ella dio alguna orden sobre las rutas en Santa Cruz, sino que incluso se trata de un delito imposible, por cuanto ella no tenía facultades sobre obras que se diseñaron en Santa Cruz, se licitaron, se adjudicaron, se controlaron y se pagaron en Santa Cruz. El texto del recurso, 40 páginas, sostiene además que “no hubo juez imparcial ni objetividad de los fiscales y alevosas arbitrariedades cometidas para fundar falsamente la condena de CFK”, señalaron cerca de la exmandataria.

Voceros del titular de la Corte, Horacio Rosatti, hicieron trascender que los supremos se expedirían en julio o agosto, antes de las elecciones. Parece difícil, inicialmente por las internas en la Corte y porque, además, es una incógnita cómo se integrará el máximo tribunal, ya que hay que ver si ingresan Ariel Lijo y Manuel García Mansilla. El pronóstico es que no habrá resolución en 2025, aunque habrá que ver cómo juega la política y la influencia de la alianza mediático-judicial contra la expresidenta.

Maradona y su muerte

El 11 de marzo está previsto el inicio del juicio por la muerte del ídolo. Será en San Isidro, en un ámbito muy chico --la misma sala del juicio por el crimen de María Marta García Belsunce-- en el que apenas entrarán los participantes del juicio: los jueces (Maximiliano Savarino, Verónica Di Tommaso, Julieta Makintach), los fiscales (Cosme Irribarren, Patricio Ferrari, Laura Capra), cinco querellas en representación de los hijos (estarán los abogados Mario Baudry, Fernando Burlando entre otros) y no menos de 14 defensores de los siete imputados.

La falta de lugar plantea cómo se accederá a lo que suceda dentro de la sala, con repercusión mundial. Por ahora, no está decidido. Se habla de una transmisión a través de un canal judicial, con acceso otorgado sólo a los que se acrediten.

Los fiscales afirman que los profesionales incurrieron en gravísima mala praxis pero que, además, en los chats advertían el catastrófico final que se venía, sin que alteraran en nada lo que se estaba haciendo. Por eso acusan por homicidio con dolo eventual. Las defensas objetarán las conclusiones de la junta médica y posiblemente planteen que Maradona no quería más tratamientos, que se negaba incluso a que le tomen la presión y que esos eran sus derechos. Las audiencias serán lunes, miércoles y viernes, con unos 300 testigos, lo que hace pensar en un juicio de tres o cuatro meses.

Cancha inclinada

Como viene ocurriendo, Comodoro Py pone el acento en las causas contra exfuncionarios de gobiernos del peronismo. En marzo arranca el juicio por la compra de Gas Natural Licuado, con Julio De Vido como principal imputado. Hasta el exministro de Macri, Juan José Aranguren, señaló que ese expediente es un disparate y el perito David Cohen, de la mano del fallecido juez Claudio Bonadío, firmó un dictamen falso copiando textos de estudiantes chilenos. Actualmente hay un juicio en el que está imputado por falso testimonio agravado. Cuando la causa se caía a pedazos, apareció como testigo el falso abogado Marcelo D’Alessio, señalando que Cristina había llamado por teléfono para exigir que los seguros se hicieran con Nación Seguros. D’Alessandro entregó carpetas que, según dijo, le entregó un testigo de identidad reservada, pero todo era un fraude. Lo insólito es que la causa siguió adelante y el juicio arrancará en marzo.

También en marzo empezarán las audiencias por la novela de Andrea Del Boca -Mamá Corazón-, realizada en un convenio que firmaron el Ministerio de Planificación y la Universidad de San Martín. El supuesto delito imputado es defraudación del Estado.

Y en abril arranca el juicio por las plantas de potabilización de aguas, también con Julio De Vido como imputado, pero con la empresa brasileña Odebrecht --socia del grupo Macri-- en el centro de la escena. El primo del expresidente, Angelo Calcaterra, también estará en el banquillo. En Brasil declararon que pagaron coimas, pero esos testimonios fueron anulados y habrá que ver cómo se formula la acusación en Argentina. Una sospecha instalada es que los bolsos con millones de dólares de coimas que el exsecretario José López tiró en el convento de General Rodríguez tuvieron a Odebrecht como origen. 

Como se ve, la ultra-actividad de Comodoro Py está centrada en los exfuncionarios del peronismo y no se avanzó en una sola causa ligada a Macri o su entorno. Con una diferencia sustancial de fondo. A CFK no se le encontró ni una cuenta en el exterior, ningún bien no declarado ni sociedades creadas en paraísos fiscales. Macri, en cambio, figura en los Panamá Papers, las operaciones con los parques eólicos se hicieron con una sociedad de Luxemburgo; lo mismo aparece en la causa de los peajes y, lo más grave, toda su familia ingresó al blanqueo con millones de dólares provenientes de operaciones oscuras.