Con bombos y platillos, el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, anunció este lunes un nuevo golpe al cine nacional al eliminar un tributo a las películas extranjeras que permitía aumentar el financiamiento para la producción argentina.
Frente a esta decisión, que el Gobierno asegura que toma en defensa de los espectadores, el director de cine Julio Ludueña lanzó una dura crítica y explicó el verdadero motivo detrás de la medida.
“Sturzenegger publicó un tweet en su campaña contra la cultura nacional y contra el cine nacional, amplificado por el resto de los medios, explicando que una resolución del INCAA del 2011, que ellos eliminaron, sumaba costos a la entrada del cine para 'expoliar' a los espectadores”, repasó Ludueña.
¿Pero esto era efectivamente así? La respuesta es negativa. “La realidad es que esa resolución lo que establecía es que las películas extranjeras debían pagar para obtener los certificados de exhibición según la cantidad total de pantallas que ocuparan”, explicó el también directivo de Directores Argentinos Cinematográficos (DAC) en la 750.
En realidad, la citada resolución establecía que las películas extranjeras debían pagar por hasta un total de 40 pantallas un valor de 300 entradas en AMBA y 150 en las provincias, variando hasta llegar a 12 mil entradas en AMBA y 6 mil en las provincias por un total de 160 pantallas utilizadas.
Por eso, afirmó Ludueña, el "verdadero objetivo de Sturzenegger y sus mandantes es que la industria audiovisual norteamericana sea dueña absoluta del mercado argentino sin que ninguna producción argentina pueda competirle".
“En los años 50 nos bloquearon la película virgen para que no filmáramos, ahora directamente bloquean toda la industria nacional de cualquier rubro, grande o pequeña", apuntó.