El Comité Permanente de Defensa de Derechos Humanos (CDH) denunció 27 desapariciones forzadas y un nuevo asesinato presuntamente a manos de militares en Ecuador, en el marco de la política de mano dura que lleva adelante el presidente Daniel Noboa.
El CDH denuncia abusos y "patrones" como "la arbitrariedad en el momento de la detención" y "acciones sin ningún tipo de control" que derivan en violaciones de derechos humanos con la "participación directa de agentes del Estado".
"Al día de hoy encontramos 27 víctimas de desaparición forzada", añadió en una conferencia de prensa en Guayaquil Fernando Bastias, abogado del CDH, que acompaña a las familias de los desaparecidos.
El organismo además denunció el presunto asesinato de un adolescente de 14 años por parte de militares, el 30 de enero en Guayaquil. El menor estaba jugando fútbol con su hermano y otros vecinos cuando empezó un operativo y hubo disparos. Hay dos heridos.
El adolescente corrió asustado, pero fue gravemente herido y murió en un hospital al día siguiente, contó su padre Milton Rodríguez, un agricultor.
En febrero del año pasado, un joven de 19 años y sin antecedentes penales murió tras recibir disparos de militares durante un operativo.
A estos casos se suma el de los cuatro menores que fueron capturados por militares y cuyos cuerpos aparecieron quemados días después. Sus muertes provocaron conmoción y 16 uniformados fueron vinculados al caso.
"Muchas de las personas desaparecidas fueron detenidas sin ningún tipo de motivaciones en controles en la vía pública", dijo Billy Navarrete, director del CDH.
Las disputas por el control del narcotráfico desató una violencia sin precedentes. En 2023, la nación cerró con una tasa récord de 47 homicidios por cada 100.000 habitantes.
El gobierno asegura que gracias a su política de mano dura la tasa de asesinatos disminuyó a 38 por cada 100.000 personas en 2024.