El Gobierno de la Provincia de Buenos Aires convocó a los gremios que nuclean a trabajadores de la administración pública, docentes y médicos para dar inicio a la primera mesa de negociación paritaria del año. No hubo una oferta formal del Poder Ejecutivo, pero los referentes sindicales salieron de los encuentros con la intención de que se pueda resolver para el jueves 13, que es la fecha límite para realizar la liquidación de los sueldos.
Como marcó Buenos Aires/12, en la última negociación de la administración Kicillof con las entidades sindicales se acordó un incremento del 8 por ciento desdoblado en dos partes, es decir, un cuatro por ciento para octubre y el mismo porcentaje de incremento para noviembre. Ahora, pretenden que el incremento supere los nueve puntos porcentuales.
Las reuniones se llevaron adelante en la sede del Ministerio de Trabajo en La Plata, donde también hubo representantes de la cartera de Economía, del Instituto de Previsión Social (IPS) y de la Dirección General de Cultura y Educación (DGCyE).
Luego de “poner en valor la convocatoria” que había sido pedida a través de diversas notas en enero, los referentes de las entidades gremiales dieron cuenta de los diversos planteos: la recuperación del poder adquisitivo, fue el principal.
“Necesitamos discutir un aumento salarial que le gane la inflación que hemos perdido en este último tiempo”, sentenció el titular de ATE bonaerense, Claudio Arévalo. Asimismo, el dirigente señaló que se planteó al Gobierno la necesidad de "avanzar con los pases a planta permanente de todos los trabajadores de la salud que están precarizados, entre otros pedidos específicos como la derogación de la resolución 293, la convocatoria a actos públicos para la cobertura de cargos, un convenio colectivo de trabajo que dignifique la tarea del trabajador estatal y llevaremos, también, la problemática del IOMA". “Que nos convoquen a la brevedad para que nos ofrezcan un aumento digno que necesitamos los trabajadores del estado de la provincia de Buenos Aires”, pidió.
El dirigente reconoció que los funcionarios tomaron nota de los pedidos y se esperanzó con un llamado para la semana entrante. “Esperemos que sea antes del cierre de la liquidación salarial, entonces habría una convocatoria y ahí un ofrecimiento”, dijo. Según sus estimaciones, los estatales perdieron un 9,5 por ciento entre el cierre de año y lo que va del corriente.
En los encuentros, la Provincia expuso “las dificultades” relacionadas con el Presupuesto que no se aprobó en la Legislatura y “el ensañamiento” del Gobierno nacional contra el de Axel Kicillof.
“Nosotros tenemos la misión de defender a nuestros compañeros y compañeras y es por eso que hemos traído a esta mesa de discusión nuestras pretensiones y esperamos una nueva convocatoria en el transcurso de la semana que viene, antes del cierre de liquidación, para poder llegar a un aumento”, dijo Juan Oyarzabal, representante de UPCN. “Entendemos que la semana que viene va a ser clave”, aseveró.
Por su parte, los integrantes del Frente de Unidad Docentes Bonaerense (FUDB) sumaron el reclamo por el funcionamiento periódico de todas las comisiones técnicas para abordar cuestiones laborales, como la sobrecarga de tareas a los maestros y continuar con el tratamiento y construcción del Convenio Colectivo de Trabajo del sector y adelantar el calendario de cobro de febrero debido al feriado de carnaval.
En tanto, los médicos no solo llevaron el reclamo de aumento salarial para el sector, sino que también pidieron “mejorar el funcionamiento de los servicios de los hospitales” y, en particular, “jerarquizar salarialmente a los profesionales que se desempeñan con cargos de mayor responsabilidad”, como jefes de sala o de servicio, tal marcó el titular del gremio CICOP, Pablo Maciel.
“También pedimos continuar incrementando la bonificación que acordamos el año pasado, que involucra a todos los profesionales que realizaron residencias dentro de un hospital y adquirieron una especialización”, valoró.
Uno de los puntos que el Gobierno bonaerense cuenta a su favor en la negociación es que, a diferencia con la Administración nacional, no hubo despidos de empleados públicos. Así lo destacó en una entrevista con Buenos Aires/12 el ministro Correa, quien destacó que “en la Provincia no se despidió a ningún trabajador y se viene respetando el proceso paritario".
"Además, no necesitamos realizar exámenes porque hay un Instituto provincial que de forma permanente los va formando y capacitando”, dijo el funcionario, al tiempo que aseveró que “en términos de procedimiento, hay una gran diferencia con el gobierno de derecha de Milei”.