En una reunión con el ministro de Economía, Luis Caputo, la Mesa de Enlace pidió retenciones cero a las exportaciones y, en principio, sostener la baja que termina en julio, más allá de ese mes. En ese encuentro, Caputo, presionado se vio obligado a no poder prometerles la baja, pero les avisó que el próximo gravamen que eliminará será el impuesto al Cheque. De todos modos, aclaró que lo hará sólo cuando la suba de la recaudación lo permita. 

"En la medida que haya superavit fiscal se van a seguir bajando impuestos", le dijo el ministro de Economía, Luis Caputo, a los hombres de campo, en una reunión en la que también participaron el titular del ARCA, Juan Pazo, y el secretario de Agricultura, Sergio Iraeta.

Tras la reunión, los dirigentes revelaron que desde el Gobierno se comprometieron a que el próximo impuesto que se tocaría es el de los débitos y créditos, conocido como el impuesto al cheque. Este compromiso se da en un escenario en el que el sector todavía espera definiciones sobre la campaña gruesa, golpeada por la falta de humedad en los suelos.

Sobre retenciones, los dirigentes plantearon la necesidad de
que siga la tendencia a la baja de las alícuotas y que en la
medida de lo posible, se vuelva permanente. Además, pidieron que el Gobierno se involucre en explicarles a los productores la conveniencia de vender con la baja de las
alícuotas. Esto responde a que si bien la venta de granos ha tenido un mayor dinamismo al que mostró los días anteriores, hay dudas sobre si el beneficio llegará a los productores.

Por el campo, participaron del encuentr con funcionarios nacionales el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino; al titular de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Carlos Castagnani; a la presidenta de Federación Agraria Argentina (FAA), Andrea Sarnari; y al presidente de Coninagro, Lucas Magnano.