Tras la aprobación -por amplia mayoría- de la suspensión de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) en la Cámara de Diputados, se espera que en las próximas semanas el proyecto se apruebe sin sobresaltos en el Senado. De concretarse, este año no se utilizará este mecanismo establecido desde 2009 para definir candidaturas. El proyecto libertario generó un fuerte debate al interior de los principales espacios políticos y rompió la disciplina partidaria de los bloques legislativos. En diálogo con Página/12 tres especialistas en opinión pública, encuestas y analisis electoral reflexionan sobre el nuevo escenario para responder la pregunta: "¿Quién gana y quién pierde si no hay primarias?"

Un contexto favorable a la suspensión

Julio Burdman, docente, politólogo y titular con Vanina Isasi de la consultora Isasi-Burdman, señala que existe desde hace tiempo un amplio rechazo a las PASO en la opinión pública. “La eliminación de las PASO tiene una gran popularidad. La gente también se opone al desdoblamiento de las elecciones nacionales y locales. El votante lo que quiere es votar menos veces y las PASO son vistas desde hace mucho tiempo como una instancia inútil”, explica. Según el último reelevamiento realizado en enero, más del 80% de los porteños está a favor de eliminar o suspender las primarias.

Más allá de que favorece a quienes se muestran a favor de "simplificar el proceso electoral", como declama el Gobierno Nacional, Burdman agrega que la medida también beneficia a quienes manejan “las lapiceras” de los partidos. “Tanto a Karina Milei, al frente de La Libertad Avanza, como a Cristina Kirchner, en el justicialismo, les sirve para evitar la pérdida de control de un partido nuevo e incipiente”, afirma.

En el caso de La Libertad Avanza, la suspensión de las PASO les evitaría a los hermanos Milei tener que enfrentar competencias internas en provincias donde hay múltiples potenciales candidatos. Como suele suceder en fuerzas de crecimiento vertiginoso como la de los libertarios, existen dirigentes que tal vez no son los más competitivos electoralmente pero que reclaman su legitimidad para su postularse producto de su presencia desde la fundación misma del partido en el distrito. Esa situación choca con la necesidad del Ejecutivo Nacional de alcanzar la mayor cantidad de bancas posibles en el Congreso para avanzar con su agenda radical de reformas, más allá de las lealtades o la pureza originaria de sus aspirantes.

Burdman destaca que, a diferencia de escenarios anteriores, esta vez hay una coincidencia de intereses entre oficialismo y la oposición: “La principal fuerza del oficialismo y la principal fuerza de la oposición, que es Unión por la Patria y, sobre todo, su versión bonaerense, están interesadas en la suspensión o eliminación”.

Por otro lado, el PRO, que históricamente se benefició de las PASO, ahora parece reacio a mantenerlas. Burdman recuerda que Mauricio Macri, aunque fue un gran beneficiario de las primarias en 2015, cuando se fundó Juntos por el Cambio, ya se mostró en contra durante su presidencia. “Macri quedó traumado con lo que pasó en las primarias de 2023, donde sus candidatos perdieron en varias provincias”, explica. Ante la incertidumbre del escenario político de cara a las presidenciales de 2027, el PRO optó por la suspensión y no la eliminación (como quería LLA).

El ahorro económico y la simplificación electoral

Analía Del Franco, consultora especializada en investigación aplicada y desarrollo estratégico, coincide en que la suspensión de las PASO es vista favorablemente por la ciudadanía. “La gran mayoría de la gente considera que votar tantas veces y gastar tanta plata no está bueno”, afirma.

Para Del Franco, la medida le permitirá al oficialismo nacional simplificar el proceso electoral, ajustar sus cuentas y evitar desgastes innecesarios. En el caso de la provincia de Buenos Aires, por ejemplo, la suspensión de las PASO podría facilitar que Axel Kicillof adelante las elecciones provinciales y "gane independencia". El gobernador bonaerense viene dando señales en ese sentido en las últimas semanas.

Los diputados que responden a la expresidenta, Cristina Kirchner, votaron en contra de la suspensión en Diputados, mientras que los partidarios de Sergio Massa votaron a favor. La fragmentanción de UxP en esta votación puso en evidencia la falta de una estrategia unificada y de una conducción que ordene el proceso. Del Franco advierte que el manejo de estas “ingenierías electorales” no siempre dan los frutos esperados. “El peronismo ya ha sufrido bastante con esto. Son conversaciones especulativas que corren en paralelo a las necesidades de la gente y que finalmente deterioran electoralmente”, sostiene.

Las PASO como ordenadoras de la oferta electoral

Roberto Bacman, sociólogo y titular de la consultora CEOP, destaca que las PASO funcionaron históricamente como un mecanismo para ordenar la oferta electoral. “Las PASO le sirven mucho más a las oposiciones o al partido que tiene una crisis interna porque les resuelve el problema de ir divididos a la elección”, explica.

En 2023, por ejemplo, las PASO le permitieron a Massa aprovechar la interna y consolidarse como candidato del Frente de Todos. Sin embargo, Bacman señala que este mecanismo también tiene sus limitaciones. “Lo que le falló a Unión por la Patria fue el norte grande, que le favoreció a Milei”, recuerda.

Para Bacman, la suspensión de las PASO beneficia principalmente a los gobernadores y a los intendentes de las grandes ciudades. “A cada provincia le conviene adelantar la elección, que es una especie de PASO porque te muestra lo que puede pasar en la elección nacional en su distrito”, afirma.

El impacto en la oposición y la izquierda

La suspensión de las PASO también tiene implicancias para la oposición no peronista y la izquierda. Bacman señala que la UCR, dividida en oficialistas, independientes y opositores, enfrenta un desafío estructural. “Ricardo Alfonsín va a ir a buscar votos de la UCR opositora”, anticipa, en referencia al dirigente bonaerense que renunció formalmente al partido centenario y encabeza ahora un armado opositor no peronista.

En cuanto a la izquierda, el titular de CEOP destaca que está creciendo el malestar en algunos sectores sociales y que eso puede aumentar su caudal electoral. “Crece el segmento de los enojados pero a la izquierda no le interesan las PASO para dirimir candidaturas”, afirma. De hecho, las primarias establecen un piso de votos para pasar a las elecciones generales, lo que termina siendo una barrera para algunos espacios más chicos. Incluso, si los resultados de las primarias son poco alentadores para un partido o frente, eso tiende a desalentar su voto en las generales. Esa tendencia, sin embargo, es más pronunciada cuando se eligen cargos ejecutivos y no es tan fuerte en las legislativas, como esta vez.

La suspensión de las PASO refleja un cambio en la dinámica política argentina, donde la simplificación del proceso electoral y el ahorro económico parecen primar sobre la necesidad de garantizar la democracia y la transparencia interna. Sin embargo, como advierten los especialistas, estas jugadas de ajedrez electoral no están exentas de riesgos. “Está bueno que todo esto se converse, pero primero hay que señalar que estas ingenierías no están dando frutos como se cree”, concluye Del Franco.