En medio de la tregua de la CGT con el gobierno y mientras se multiplican los aumentos salariales bajo la línea que dispuso la Casa Rosada, el secretario Adjunto de SMATA y diputado de Unión por la Patria, Mario “Paco” Manrique, salió al cruce de la conducción de la central obrera y afirmó que hoy “no es representativa de de los derechos de los trabajadores”, al tiempo que señaló que “está ausente en los hechos y en las opiniones”, al tiempo que cruzó al gobierno y reclamó contra el recorte de derechos y el plan de ajuste.
El malestar es creciente en un sector del sindicalismo, que brega por un plan de lucha conjunto para hacer frente a las políticas impulsadas por el gobierno: sin ir más lejos, este lunes el presidente Javier Milei volvió a insistir en que pretende avanzar en una reforma laboral. Ya de por sí, la ley Bases incluía una amplio capítulo laboral que para el sindicalismo representaba un fuerte recorte de derechos.
“El Gobierno habla de reforma laboral y la CGT dice que no hay ambiente social para hacer un paro. Creo que está de más decir que la CGT está ausente en los hechos y en las opiniones”, se indignó Manrique en una entrevista con la 750, donde además sostuvo que el movimiento obrero “debería tener presente que con luchas sectoriales no se arregla” porque “se necesita inteligencia para enfrentar al gobierno”.
Mientras crece la conflictividad laboral y se acrecienta la crisis económica, hay sectores del sindicalismo que exigen una postura más enérgica de parte de la conducción, que por ahora se muestra en tregua con el gobierno, y apuesta a que, al menos de momento, cada sector resuelva de manera independiente sus negociaciones.
Manrique no duda en asegurar que ese abordaje es errado y apuesta a una respuesta colectiva para enfrentar al gobierno. “Este es un gobierno que desarma al Estado, dice que los laburantes son todos ñoquis, ladrones, tenés un gobierno que no habla de industrializar el país ni tiene una sola propuesta para incentivar el empleo, de más está decir que la CGT está ausente en los hechos y en las opiniones”, resaltó el sindicalista.
“No soy un abanderado del paro, el paro es una herramienta del movimiento obrero, que tracciona en momentos específicos, pero el movimiento obrero debería tener presente que con luchas sectoriales esto no se arregla. Se necesita inteligencia para enfrentar al gobierno”, reclamó el sindicalista.
En este sentido, aseguró que “la CGT hoy no es representativa de los derechos de los trabajadores”, y resaltó que “el trabajador no encuentra referencia donde encolumnarse”. “Hay que entender la situación que estamos viviendo. La conflictividad no se expresa únicamente en la 9 de Julio o la plaza del Congreso”, sostuvo, y remarcó: “Tal vez hay que llevarla a los lugares donde están los conflictos, porque la situación es agobiante, hay que usar otros mecanismos. Ni siquiera se convoca a reuniones regionales, consejo directivo, para analizar estrategias que se puedan traccionar para resistir estas políticas”.
La conflictividad en el sector automotriz
Manrique dijo que en su sector, la industria automotriz, se sufren los embates de la economía como todas las actividades. En este sentido, hay preocupación entre los trabajadores de la planta de Mercedes-Benz ubicada en la localidad de Virrey del Pino, partido de La Matanza, que recibieron la confirmación de que la multinacional alemana había llegado a un acuerdo de venta con el empresario argentino Pablo Peralta y se retiraba de la fábrica luego de más de medio siglo de historia en Argentina.
Entre los empleados surgieron caras de preocupación y preguntas. ¿La compañía no iba a ofrecer retiros voluntarios? ¿Nos van a respetar la antigüedad? ¿Qué garantías de que continúe con la producción tenemos? Hacia mediados de febrero se hará oficial el traspaso.
“Para que un país salga adelante, tiene que haber interés en la industrialización. Nosotros batallamos todos los días con las empresas. El 20 o 22 de febrero se firma lo de Mercedes-Benz, donde, gracias a Dios, tengo cubiertos a los 1800 compañeros”, aseguró el lunes el titular del del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA), Ricardo Pignanelli. Si bien ninguna otra fuente lo comunicó, la transacción ya sería un hecho.
En tanto, Manrique aseguró que “si revisás los discursos del Presidente desde que era candidato no vas a encontrar un discurso donde le salga la palabra “pueblo”. No habla del pueblo, dice que los buenos son los que pueden comprar autos de lujo, y no digo que sean malas, se han sacrificado y tuvieron éxito, nadie les regaló nada. Pero son el 10 % de la sociedad”.
“Nunca el gobierno explica en qué va a favorecer a la creación de puestos de trabajo una reforma laboral. Simplemente está cediendo al pedido de los empresarios especuladores de la Argentina, como toda decisión que toma este gobierno, está apuntada a recortar lo que ellos entienden que son privilegios y para nosotros son derechos”, enfatizó Manrique.