Maximiliano Areco es uno de los seis trabajadores despedidos por la multinacional Linde Praxair, una empresa que, según sus propias palabras, es la productora de gases industriales “más importante del mundo”.

El motivo de su desafección, aseguran desde la multinacional, tiene que ver con una supuesta crisis que atraviesa la empresa. Sin embargo, Areco explicó por la 750 que en los balances la firma tiene “ganancias extraordinarias”.

Ante la pregunta Víctor Hugo Morales, por lo tanto, explicó que ya en los últimos meses “la empresa viene planteando que por una disminución del trabajo tiene que despedir gente”. Por eso, un mes y medio atrás despidieron a 10 personas y los trabajadores hicieron una medida de fuerza para pedir por su reincorporación, llegando, finalmente, a una tregua de 40 días.

Pasado este período, fueron seis los trabajadores que no pudieron volver a sus puestos de trabajo, uno de ellos el propio Areco, que se desempeña en la plata de General Pacheco.

Plantean una crisis que no es tal, porque los balances le dan ganancias extraordinarias. Lo que está pasando es que despiden de forma anti-sindical a exactivistas de cuando armamos por primera vez la comisión interna”, dijo.

Y recordó: “Yo fui el primer delegado que tuvo la empresa después de que en las reuniones de fin de año la empresa decía que era una empresa libre de sindicalismo. En 2005 logramos afilarnos al sindicato y elegir comisión interna”.

“Ahí la empresa me despide. Fuimos a la justicia y la Corte Suprema le dijo que cese con las prácticas anti-sindicales. Ahora, percibiendo un cambio de época, despide a seis trabajadores”, se lamentó.

Por eso, dijo, mientras Milei intenta avanzar sobre la memoria de los derechos humanos, la empresa “intenta atacar la memoria de los trabajadores, el bastión más duro de esa primera lucha”.