El ex presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales declaró este martes en el juicio en su contra por el beso que presuntamente le dio sin consentimiento a Jenni Hermoso, jugadora de la selección de España, durante la celebración de la Copa del Mundo. Rubiales aseguró que la situación "no fue forzada", pero tuvo ejemplos pocos claros para normalizar lo sucedido, incluyendo a su familia y futbolistas.
"Lo que ocurrió es que estaban pasando las jugadoras en ese momento, Jenni cuando se acercó a mí con una cara de que había fallado un penalti y yo le digo que se olvide que habíamos ganado, en parte, gracias a ella. Ella me aprieta, me levanta y al caer le pregunte si podía darle un besito y ya está", indicó.
"Con mis hijas no se lo doy habitualmente, pero en Fin de Año sí. Me ha pasado con algunos compañeros, siendo jugador del Levante, me pasó cuando ganamos en el Bernabéu. Yo me he comido a besos a un montón de futbolistas", agregó.
Por otra parte, dio detalles del vídeo en el avión y su trato con Jenni Hermoso post escándalo. "Es cierto que en el avión yo le pedí hacer un vídeo diciendo lo mismo que ambos habíamos declarado ya y ella me dijo que no quería hacerlo y que solo quería celebrar. Entonces, decidí hacerlo solo. Incluso me dijo'Oye Rubi, ya he sido muy clara' y yo le contesté: 'gracias'", reveló. Y agregó: "Hubo un ambiente de celebración, pero ningún revuelo. No es cierto, lo que sí había era tensión entre los responsables de comunicación".
"Me comporté como un deportista que había logrado un título y, por tanto, me equivoqué", remarcó sobre su accionar en la noche que lo colocó en esta situación. "Jenni no nos comentó nada en el avión. Ella estaba feliz y saltando como el resto de sus compañeras. La señora Hermoso igual que yo sabe lo que pasó. Yo he pedido perdón por haberme dejado llevar por la emoción, pero Jennifer Hermoso sabe que yo le pregunté y ella me contestó", subrayó.
Por último, sostuvo que el no tomó la decisión de que no fuese citada post título mundial: "Yo no digo a quién hay que convocar o alinear. Es inviable, es una ley del fútbol. Solo vienen convocadas y yo ejerzo de acompañante. El jefe de ellas es el seleccionador".