Los nuevos aranceles recíprocos, anunciados este jueves por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, podrían afectar negativamente a Argentina en sectores específicos como la siderurgia, encareciendo los productos argentinos en el mercado estadounidense y disminuyendo su competitividad frente a proveedores de otros países, indicó a Página/12 el economista y docente de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Guido Lapa.
"Estados Unidos es un destino fuerte para algunos rubros de la Argentina, como la siderurgia. Si efectivamente el gobierno de Trump termina aplicando lo que dice que va a aplicar, para Argentina sería pesado, porque el país y todo el Mercosur cobran aranceles muy altos", señaló Lapa. "Si Estados Unidos establece tarifas elevadas sobre los productos argentinos, estos se encarecerían mucho, lo que probablemente llevaría a los consumidores norteamericanos a optar por proveedores de otros países", estimó.
Sin embargo, precisó que para la economia argentina puede ser importante que se encarezcan mucho sus productos en Estados Unidos, pero para ese Washington el comercio con Argentina es muy poco relevante. Ni Argentina es un socio o proveedor muy importante para Estados Unidos, ni representa un mercado significativo para los bienes norteamericanos, ni viceversa. Nuestros socios comerciales más cercanos son Brasil y China".
De acuerdo a Lapa, en lugar de Argentina, el principal afectado por los aranceles recíprocos es la Unión Europea (UE). "A ellos está dirigida esta medida y por ahora es una política que funciona más como una amenaza. No sé si finalmente se van a terminar aplicando esos aranceles, pero si sucede cambiaría mucho el mapa comercial y geopolítico de todo el mundo, no lo descarto", consideró.
El académico de la UBA detalló que, desde su llegada a la Casa Blanca, Trump ha desafiado el orden geopolítico establecido durante décadas y ha comenzado a reorganizarlo. Según él, los aranceles comerciales son la herramienta clave de su estrategia, con la que ha logrado ejercer presión de manera muy eficaz. "Hay que ver lo que hizo con Canadá y México: los amenazó con aranceles del 25 por cientos, y esos países reaccionaron cediendo a fortalecer las fronteras y comprometiéndose con el tema de la inmigración. Ahora el asunto quedó en pausa durante un mes para ver si cumplen lo que Trump les exigió", explicó Lapa.